"PARÁSITOS" de Marius von Mayenburg

 
 
Parásitos: seres que viven a expensas de otros llamados huéspedes
 

Federica   
A la mañana, cuando me despierto, no me acuerdo de por qué estoy acá, y me lleva todo el día acordarme de nuevo.
Ringo    
Tenés mi misma mirada, tan vacía como la mía. Vos pensás que todo el universo está habitado y que nosotros somos el alimento vivo. Y esperás que llegue el fin.
Federica
Sí.
 

Parásitos es una competencia de crueldades entre unos personajes en mutua dependencia. La obra nos confronta a los vínculos patológicos que los hábitos sociales y familiares disfrazados de normales nos condenan a repetir.
Un sociedad perdida, decadente, hipócrita cuyos integrantes viven en la constante paradoja de necesitarse mutuamente y destruirse simultáneamente.
Un teatro en el que los deseos y las neurosis se manifiestan de modo urgente, carnal.
Parásitos sociales y emocionales, los protagonistas se necesitan para seguir existiendo y al mismo tiempo se humillan y destruyen. Las armas son la discriminación, la ofensa, el cinímo, la acusación.
El lenguaje no sirve para la comunicación y se utiliza como instrumento de tortura y poder.
El verbo no tiene destino, no sirve para llegar al otro. Los personajes son parásitos, cautivos de su propio ser, que chocan constantemente con violencia, mientras que el purgatorio de las crueldades no cesa.
 
 

Funciones

Sábados 21 hs. y domingos 19:30 hs.

Espacio Callejón

Humahuca 3759

Reservas 4862-1167

Localidades $ 10.-


 
Elenco
Carlos Bordchard    Petrik
 
Laura Mantel       Federica
María Merlino      Betty
Pablo De Nito       Ringo
Carlos Weber    Multscher
 
Autor
Marius von Mayenburg
Traducción
Claudia Baricco
Diseño de Iluminación
Ricardo Sica
 

Asistencia de Dirección

Elsa Sciascio
Puesta y dirección
Ricardo Holcer 
 
Sobre la obra,
"Cada relación personal constituye un permanente experimento con la resistencia del otro". Mayenburg
El viejo Multscher se durmió al volante y atropelló al joven Ringo. Desde entonces, Ringo vive en una silla de ruedas, no sale de su casa y depende de su novia Beti. Aunque no le guste, tiene que soportar que Beti acoja temporalmente a su hermana Federica, a la que encontraron inconsciente tirada al pie de una autopista. Federica está embarazada y amenaza con suicidarse. Su marido, Petrik, que sólo se interesa por una serpiente con la que convive, aparece de pronto en la casa de Beti buscando un dudosa reconciliación. Finalmente, hasta Multscher se presenta, ya que no soporta vivir solo con el peso de la culpabilidad...
 
Sobre la puesta,
En el 2002 el Goethe Institut, dentro de un ciclo de teatro semi-montado dedicado a dramaturgos contemporáneos alemanes, convocó al director Ricardo Holcer para dirigir Parásitos, de Marius von Mayenburg, autor inédito en nuestro país. La calidad del texto y el interés que se fue suscitando a partir del trabajo escénico los llevó a elaborar la pieza completa. La misma se presentó en noviembre del 2002 con dos únicas funciones en el Goethe Institut y fue allí mismo donde fue se la convocó para presentarse dentro de la programación del 2003 en el Espacio Callejón a cargo del dramaturgo y director Emilio García Wehbi.
Parásitos como texto es huésped del movimiento de la obra como puesta. Escrita para ser actuada, la obra avanza y se mueve parasitando al texto, como los acontecimientos parasitan a la historia como narración. Así, los personajes se parasitan a sí mismos, a los otros y a los actores que los interpretan. A pesar de la densidad del tema, la obra bordea el delirio en escenas que por su patetismo desencadenan una fuerte dosis de humor que desconcierta e inquieta. La suspensión del sentido único de los acontecimientos convierte a cada instante en inclasificable: ante la imposibilidad de discernir el tono, la mezcla suspende el juicio de valor e incomoda. Estas sensaciones, a su vez, se potencian con una puesta en escena que plantea un espacio circular, a nivel del piso y sin un frente fijo, creando una multiplicidad de puntos de vista que es esencial para acercarse a personajes tan complejos. Los espectadores distribuidos en tarimas rodean en extrema proximidad a los actores, que entran y salen de escena con desplazamientos casi coreográficos por diagonales desde los cuatro ángulos, y circulando por detrás del público a ritmo vertiginoso, sorprenden a cada inesperada aparición. Esto convierte al escenario en una auténtica "arena" en la que los personajes se sostienen en la escena solo hasta que son expulsados por otros y cuando consiguen regresar, es para un nuevo enfrentamiento...
Así la historia da un giro, el giro traza un círculo, y el círculo se cierra sobre sí mismo, parasitándose.
 
Sobre el autor,
Marius von Mayenburg nació en 1972 en Munich (Alemania), donde estudió filología alemana antigua. En 1992 se trasladó a Berlín, donde estudió escritura escénica en la Escuela Superior de Arte Dramático. Fue asistente de dirección en los Münchner Kammerspiele. Desde 1998 colabora con Thomas Ostermeier como dramaturgo y autor: primero en la "Baracke" del Deutscher Theater y después en la Schaubühne am Lehniner Platz en Berlín. Su obra de teatro, Feuergesicht (Cara de fuego) fue premiada con el "Premio Kleist para la promoción de dramaturgos jóvenes" (Frankfurt /Oder 1997) y el "Premio de la Fundación de autores de Frankfurt" (1997). La obra se tradujo a más de 25 idiomas y fue representada tanto en Europa como fuera del continente. Parasiten (Parásitos) se estrenó el 18 de mayo de 2000 en el teatro "Deutsches Schauspielhaus Hamburg" de Hannover, dirigida por Thomas Ostermeier. Se han estrenado también Haarmann (Hombre peludo, 2001) y Das Kalte Kind (El niño frío, 2002), esta última contó con la dirección de Luk Perceval.
 
Sobre el director,
Ricardo Holcer posee una trayectoria artistica de más de 20 años donde se ha desarrollado no sólo como director sino también en las áreas de dramaturgia, musicalización e iluminación. En esta vasta carrera ha llegado a estrenar unos treinta espectáculos en diversas salas teatrales. Cabe destacar, Los siete gatitos, de Nelson Rodríguez en el Teatro Nacional Cervantes; Panuco, de Raúl Brambilla en el Teatro Presidente Alvear; Woyzeck, de George Buchner; y La Metamorfosis, de Frank Kafka, ambas en el Teatro General San Martín.
Dentro del circuito de teatro "Off" es reconocido por sus puestas innovadoras de Samuel Beckett en Movitud Beckett, William Shakespeare en América Macbeth y el Marqués de Sade con Sade Subte Show, entre otras.
Ha dirigido también a muchos actores prestigiosos como Nathan Pinzón, Arturo Mali, Lorenzo Quinteros, Damián De Santo, Tino Pascali, Estela Moly, Jorge Petraglia, Marcos Zucker, Márgara Alonso, Antonella Costa, Rubén Stella y Noemí Frenkel, entre otros.
Ha desarrollado también una interesante carrera en el exterior, estrenando diversos espectáculos en Brasil como EE.UU.
Y también ha ejercido la docencia dictando cursos y talleres en universidades y centros culturales dentro de nuestro país como fuera. En la actualidad tiene a su cargo la Cátedra de Dirección de Actores en tres escuelas oficiales de cine: CIEVYC (Centro de Investigación y Experimentación en Cine y Video), CIC (Centro de Investigación Cinematográfica) y el BAC (Buenos Aires Comunicación), también se desempeña como docente en la UBA y dicta talleres de Teatro y Actuación en el C.C.Ricardo Rojas. En 1998 inauguró su propio Estudio en el que realiza talleres, cursos, conferencias y muestras.
 

 

 

 

 

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