"PIRATAS DEL CARIBE: EN EL FIN DEL MUNDO"
de Gore Verbinski

Título original:
Pirates of the Caribbean: At World’s End
 

Información de Producción.

Son épocas oscuras en las que la Era de la Piratería se acerca a su fin. Lord Cutler Beckett (TOM HOLLANDER), de la Compañía de Comercio de las Indias Orientales, ha logrado controlar al aterrador barco fantasma El Holandés Errante y a su malévolo y vengativo Capitan, Davy Jones (BILL NIGHY). El Dutchman navega errante por los Siete Mares, imparable, destruyendo barcos piratas sin piedad bajo el mando del Comodoro Norrigton (JACK DAVENPORT).
Will Turner (ORLANDO BLOOM), Elizabeth Swann (KEIRA KNIGHTLEY) y el Capitán Barbossa (GEOFFREY RUSH) se embarcan en una búsqueda desesperada para reunir a los Nueve Lores de la Corte de Brethren, con la última esperanza de vencer a Beckett, al El Holandés Errante y a su Armada.
Pero uno de los Lores ha desaparecido: el Capitán Jack Sparrow (JOHNNY DEPP), el mejor o peor pirata de la historia, ha quedado atrapado en el “Armarior” de Davy Jones, luego de su encuentro con el mounstruoso Kraken.
Nuestros héroes, incluidos Tia Dalma (NAOMIE HARRIS), Pintel (LEE ARENBERG) y Ragetti (MACKENZIE CROOK), conformando una alianza cada vez más frágil, deben viajar hacia una exótica y peligrosa Singapur y allí enfrentarse al Capitán Sao Feng, el pirata chino (CHOW YUN-FAT), para conseguir las cartas de navegación y un barco que los lleve hasta el fin del mundo para rescatar a Jack.
Pero aun si rescatan satisfactoriamente al Capitán Jack, la reunión de la legendaria Corte de Brethren puede no ser suficiente para controlar a la temible marea de Beckett, Davy Jones y su Armada poderosa… a no ser que la caprichosa diosa de los mares Calypso, aprisionada en un cuerpo humano, pueda ser liberada y convencida de acudir en su ayuda.
Traición tras traición, se hace evidente que Jack, Will, Elizabeth, Sao Feng y Barbosa tienen cada uno su propio plan y no pueden confiar en nadie. Pero hay que elegir de qué lado estar y hacer alianzas para la última batalla, un enfrentamiento titánico que podría terminar con los piratas amantes de la libertad de los siete mares… para siempre.
JOHNNY DEPP, ORLANDO BLOOM, KEIRA KNIGHTLEY y GEOFFREY RUSH han sido reunidos en PIRATAS DEL CARIBE: EN EL FIN DEL MUNDO de Walt Disney Pictures / Jerry Bruckheimer Films, una historia épica completamente nueva dentro de la taquillera serie que narra las fantásticas aventuras del Capitán Jack Sparrow, el Capitán Barbossa, Will Turner y Elizabeth Swann. Esta vez se suma al cuarteto CHOW YUN-FAT como el Capitán Sao Feng, el pirata Amo de Singapur.
Con producción de JERRY BRUCKHEIMER y dirección de GORE VERBINSKI, el Capitán Jack y los demás zarpan hacia una nueva y espectacular aventura, en la que vuelven a enredarse en un humor divertido e irreverente que los lleva hacia nuevos reinos de aventura y fantasía. Las dos aventuras de Piratas anteriores rompieron récords en todo el mundo: La Maldición del Perla Negra tuvo una recaudación mundial de más de U$S 650 millones, cifra que fue casi duplicada por El Cofre de la Muerte, que se transformó en la tercera película con mayor recaudación de taquilla de la historia internacional con más de U$S 1000 millones, y obtuvo la sexta posición local de la historia con la gigantesca suma de U$S 423.315.812.
Los escritores de PIRATAS DEL CARIBE: EN EL FIN DEL MUNDO son TED ELLIOTT y TERRY ROSSIO, co-escritores también del primer film y de su continuación Piratas del Caribe: el Cofre de la Muerte, así como de los exitosos filmes Aladdin y Shrek. La película está basada en los personajes creados por Elliot y Rossio junto a Stuart Beattie y Jay Wolpert, y a su vez en Pirates of the Caribbean de Walt Disney. Los productores ejecutivos son MIKE STENSON, CHAD OMAN, BRUCE HENDRICKS y ERIC McLEOD.
Johnny Depp se ha transformado en uno de los actores más populares y aclamados del mundo, con un rango altamente versátil de interpretaciones a lo largo de su sobresaliente carrera. Recibió nominaciones al Premio de la Academia al Mejor Actor por sus trabajos en Piratasl del Caribe: la Maldición del Perla Negra y en Finding Neverland (2004). Su extraordinaria lista de créditos desde fines de los años 80 incluye Cry-Baby, What’s Eating Gilbert Grape?, Ed Wood, Benny & Joon, Edward Scissorhands, Don Juan DeMarco, Donnie Brasco, Fear and Loathing in Las Vegas, Sleepy Hollow, Chocolat, Blow, Once Upon A Time in Mexico, Secret Window, The Libertine, Tim Burton´s Corpse Bride y Charlie and the Chocolate Factory de Tim Burton.
Orlando Bloom se convirtió en una estrella internacional de importancia con su retrato de Legolas en la premiada trilogía de Peter Jackson, The Lord of the Rings, luego de su actuación como co-protagonista en Black Hawk Down de Jerry Bruckheimer, dirigida por Ridley Scott. Desde entonces, el actor ha protagonizado Troy, de Wolfgang Petersen, Kingdom of Heaven, de Scott, y Elizabethtown, de Cameron Crowe.
Keira Knightley llamó la atención del público internacional por primera vez con el éxito Bend It Like Beckham. Además de Piratas del Caribe: la Meldición del Perla Negra, recibió nominaciones al Premio de la Academia como Mejor Actriz por su papel protagónico en Pride & Prejudice. También protagonizó Love, Actually, King Arthur, y los próximos estrenos Atonement, Silk y The Best Time of Our Lives.
Geoffrey Rush ganó los premios Emmy, Golden Globe y Screen Actors Guild por su cautivante actuación en el film de HBO The Life and Death of Peter Sellers en la que retrató a dicho actor. Fue internacionalmente reconocido por primera vez por su protagónico en Shine de Scott Hicks, que le valió un Premio de la Academia al Mejor Actor interpretando al prodigio del piano David Helfgott. También recibió por este film los premios Golden Globe, Screen Actors Guild, British Academy of Film and Television Arts (BAFTA), Film Critics’ Circle of Australia, Broadcast Film Critics, AFI y los de New York y Los Angeles Film Critics. Obtuvo nominaciones al Premio de la Academia por su interpretación en Quills, de Philip Kaufman, y nominaciones tanto al Premio del Academia como al Golden Globe por Shakespeare in Love.
Chow Yun-Fat saltó internacionalmente al estrellato luego de más de una década como el actor más popular de Hong Kong por su memorable serie de interpretaciones que incluyeron las ahora clásicas A Better Tomorrow, The Killer, Once A Thief y Hard-Boiled del director John Woo. Chow protagonizó también Crouching Tiger, Hidden Dragon, y Anna and the King de Ang Lee y más recientemente Curse of the Golden Flower de Zhang Yimou.
Con solo siete créditos en la dirección de largometrajes, los exitosos filmes de Gore Verbinski ha recaudado más de U$S 2.000 millones en todo el mundo. Entre ellos se cuentan los megaéxitos Piratas del Caribe: la Maldición del Perla Negra, Piratas del Caribe: el Cofre de la Muerte, el escalofriante film de terror The Ring y el reconocido drama The Weather Man, protagonizado por Nicolas Cage.
Jerry Bruckheimer es indiscutiblemente uno de los productores más exitosos tanto en el cine como en la televisión. En un principio asociado con Don Simpson y luego como director de Jerry Bruckheimer Films, ha producido una cantidad sin precedentes de éxitos mundiales de alto impacto no solo en la industria, sino también en la cultura popular. Entre sus filmes pueden mencionarse American Gigolo, Flashdance, Beverly Hills Cop, Top Gun, Beberly Hills Cop II, Days of Thunder, Bad Boys, Dangerous Minds, Crimson Tide, The Rock, Con Air, Armageddon, Enemy of the State, Gone in 60 Seconds, Coyote Ugly, Remember the Titans, Pearl Harbor, Black Hawk Down, Piratasl del CAribe: la Maldición del Perla Negra, Bad Boys II, Veronica Guerin, King Arthur, National Treasur, Piratas del Caibe: el Cofre de la Muerte y el venidero National Treasure: Book of Secrets.
Jerry Bruckheimer tuvo al aire diez series de televisión simultáneamente durante la temporada 2005, un record sin precedentes en el medio para un productor individual. Entre sus series se cuentan C.S.I.: Crime Scene Investigation, C.S.I.: Miami, C.S.I.: NY, Without a Trace, Cold Case y The Amazing Race.
Jerry Bruckheimer Films and Television fue honrada con 39 nominaciones al Premio de la Academia, seis de dichos premios, ocho nominaciones al premio Grammy, cinco de dichos premios, 23 nominaciones al premio Golden Globe, cuatro de ellos, 53 nominaciones al premio Emmy, 14 de ellos, 16 nominaciones al premio People’s Choice y 11 de ellos, y numerosos premios MTV, incluido el de Mejor Película de la Década por Beverly Hills Cop, y 14 premios Teen Choice.
Junto con Depp, Rush, Bloom y Knightley, los miembros del elenco que regresan a PIRATAS DEL CARIBE: EN EL FIN DEL MUNDO son STELLAN SKARSGÅRD como Bootstrap Bill Turner, BILL NIGHY como Davy Jones, JACK DAVENPORT, como el Comodoro británico James Norrington, JONATHAN PRYCE como el aristocrático padre de Elizabeth, el Gobernador Weatherby Swann, NAOMIE HARRIS como Tia Dalma, TOM HOLLANDER como Lord Cutler Beckett, KEVIN R. McNALLY como Joshamee Gibbs, LEE ARENBERG y MACKENZIE CROOK como Pintel y Ragetti, DAVID BAILIE como Cotton, MARTIN KLEBBA como Marty; y de la primera película, GILES NEW y ANGUS BARNETT como los soldados británicos Murtogg y Mullroy. VANESSA BRANCH y LAUREN MAHER vuelven por tercera vez como las jóvenes de Tortuga favoritas de Jack Sparrow, Giselle y Scarlett. Las nuevas incorporaciones incluyen a REGGIE LEE (The Fast and the Furious) como Tai Huang, edecán del Captain Sao Feng, y diversos actores internacionales en los papeles de otros Lores Piratas, incluyendo al legendario KEITH RICHARDS como el Capitán Teague, el Poseedor del Código.
Un gran contingente del equipo creativo de Piratas del Caribe: la Maldición del Perla Negra y de Piratas del Caribe: el Cofre de la Muerte vuelve a reunirse en PIRATAS DEL CARIBE: EN EL FIN DEL MUNDO , entre ellos, el director de fotografía DARIUSZ WOLSKI; el diseñador de producción RICK HEINRICHS (nominado al Oscar por El Cofre de la Muerte), la diseñadora de vestuario PENNY ROSE; el director de arte supervisor JOHN DEXTER, la decoradora de set CHERYL CARASIK (quien compartió con Heinrichs la nominacion al Oscar por El Cofre de la Muerte), los editores CRAIG WOOD y STEPHEN RIVKIN, los supervisores de efectos visuales JOHN KNOLL y CHARLES GIBSON (ambos ganadores junto a Hal Hickel al Premio de la Academia por Piratas del Caribe: el Cofre de la Muerte), el coordinador de efectos especiales ALLEN HALL (quien compartió el Oscar por El Cofre de la Muerte con Knoll, Gibson y Hickel); el coordinador de escenas de riesgo GEORGE MARSHALL RUGE; la artista de maquillaje tres veces ganadora del Premio de la Academia VE NEILL y el jefe de peinadores MARTIN SAMUEL, quienes compartieron la nominación al Premio de la Academia por su trabajo en Piratas del Caribe: la Maldición del Perla Negra; y el compositor HANS ZIMMER. JOHN FRAZIER (Spider Man 2), ganador del Oscar, se sumó esta vez a este equipo de primer nivel como coordinador de efectos especiales.

LA PRODUCCIÓN

El éxito puede ser un jefe muy exigente… y después de Piratas del Caribe: el Cofre de la Muerte, que cosechó más de U$S 1000 millones en el mundo y obtuvo la tercera posición entre las películas más taquilleras, Jerry Bruckheimer y Gore Verbinski decidieron a volver a superar e incluso ir mas allá de las expectativas del público. “Da miedo cuando haces una película que obtiene un éxito tan grande”, confiesa Bruckheimer. “Es impredecible. Iba en contra del sentido común que una película de piratas basada en un viaje por un parque temático pudiera tener semejante éxito. Luego volvimos con el segundo film, y se supone que una secuela logra obtener un 20 o un 30 por ciento menos que la primera. Sin embargo El Cofre de la Muerte casi duplicó lo obtenido por La Maldición del Perla Negra.
Bruckheimer atribuye el éxito masivo de las dos primeras Piratas del Caribe al enorme esfuerzo y dedicación de los directores y de los talentos que hubo a ambos lados de la cámara. “Se comienza por el guión, y Ted Elliott y Terry Rossio hicieron un trabajo brillante al crear excelentes nuevos personajes y áreas motivadoras donde trabajar. Luego se agrega un director tan brillante como Gore Verbinski, quien llevó al público por un viaje estremecedor en la primera película y aun más lejos en la segunda. Y lo que realmente hace que todo funcione es ver a actores como Johnny Depp, Keira Knightley, Orlando Bloom y Geoffrey Rush siguiendo el ritmo de Gore, Ted y Terry, quienes trabajaron tan duramente para crear personajes que son atractivos, graciosos, románticos y agudos. Dar forma a todos esos asombrosos personajes, situaciones y entornos les tomó mucha energía, creatividad y tiempo a Gore, Ted y Terry.
“Luego comienza el detrás de escena”, continúa Bruckheimer, “con el diseño de producción de Rick Heinrichs, la fotografía de Darek Wolski, la música de Hans Zimmer y el resto de la gente que trabajó tanto en estas películas colaborando para convertirlas en el enorme éxito en que son.”
Para esta tercera película, el productor y el director se animaron a que los guionistas llevaran la experiencia aun más lejos… y literalmente hasta los fines de la tierra. “Lo que nos propusimos para nosotros con Jerry, Gore, Johnny y para todos los demás”, dice Elliott, “fue imaginarnos la manera de hacer otras dos películas que fueran una sola con la primera, pero sin dejar de ser cada una de ellas una pieza singular. Lo que debíamos hacer con cada una, tan pronto como se pudiera, según la historia, era satisfacer las expectativas. Luego pusimos el desafío de ir más allá y crear situaciones que la gente no pudiera anticipar. Lo que no es fácil.”
“El tema principal de En el Fin del Mundo” agrega Terry Rossio, “es la naturaleza de lo que se necesita para ser una buena persona, y cómo cada persona enfrenta esta batalla. Pensamos que todas las películas de piratas tratan sobre la ambigüedad moral y sobre buenas personas que son circunstancialmente forzadas a hacer algo malo. Entonces, desde el punto de vista de cada personaje, todos deben pasar por este desafío, esa transformación, enfrentando su propia habilidad para hacer algo con lo que no se sienten cómodos y tomando difíciles decisiones. En este sentido, cada personaje de la historia tiene un momento malvado en algún punto.”
“No hay confianza entre los personajes en ningún momento de la película,” agrega Jerry Bruckheimer. “Siempre surge un plan tortuoso para beneficiar sus propios fines. En el Fin del Mundo trata sobre dónde, cuándo y cómo va a terminar cada uno, con la constante de ver quién es el mejor.
Nuevamente, y al igual que en los dos primeros filmes, Elliot y Rossio fueron una presencia constante en el foro, tanto en el Caribe, como en Hollywood y más allá. “Su contribución fue enorme”, dice Bruckheimer, “porque trabajaron con Gore y los actores en el foro para asegurarse de que todo fuera correcto para la película y para los actores”.
“Escribir guiones es un arte”, explica Bruckheimer. “En los años 30 y los 40, en Hollywood, decidieron convocar a periodistas, novelistas y a cualquiera que supiera escribir y muchos de ellos fallaron como guionistas, ya que esto es un trabajo muy diferente. Ted y Terry son maestros en este arte. Aman las películas, las viejas y las nuevas. Están por encima de todo lo que sucede en relación con el cine. Saben qué se necesita para crear un gran personaje porque han estudiado y trabajado en ello durante años. Y son tan innovadores… Ted y Terry transforman lo convencional de las películas de piratas que pueden parecer mundanas y clichés, de tal manera que las vuelven interesantes y novedosas. Ambos, junto a Gore, han reinventado completamente todo el género de películas de piratas”.
El ámbito geográfico donde se desarrolla la historia se expande hasta el viejo Singapur y los míticos reinos de más allá. Se incorporan nuevos personajes como el Capitán Sao Feng, el pirata chino, y se reincorpora un personaje crucial: el Capitán Barbossa, recién llegado del otro lado la frontera, esta vez formando una alianza inestable con su antiguo némesis Jack Sparrow contra la Compañía de Comercio de las Indias Orientales. Conoceremos a la totalidad de la Corte Brethren de Piratas en su escondite de Shipwreck City, una galeria de asesinos de los siete mares que incluye a Teague, Poseedor del Código, interpretado por el mismísimo inmortal guitarrista de los Rolling Stones, Keith Richards. También vuelven Murtogg y Mullroy, dos de los cabezas duras vestidos en uniformes británicos del siglo XVIII.
Usando el ya famoso parque temático de Disney Pirates of the Caribbean (el último que fuera creado por el mismo Walt Disney) como trampolín y desafiando comentarios poco entusiastas acerca de una película “basada en un paseo”, Piratas del Caribe: la Maldición del Perla Negra se convirtió en éxito en todo lugar donde se dio desde su estreno el 9 de julio de 2003, acumulando en los Estados Unidos U$S $305.413.918 millones, y en el resto del mundo U$S 653.913.918 millones, rompiendo récords. El film también recibió cinco nominaciones al Premio de la Academia, incluida la de Mejor Actor para Johnny Depp. Tanto éxito obtuvo la primera Piratas, que el parque Pirates of the Caribbean fue modificado por Walt Disney Ingineering en Disneyland en Anaheim y en Walt Disney World en Orlando, Florida, a tiempo para el estreno de El Cofre de La Muerte, con el agregado de los personajes del film Capitán Jack Sparrow, Capitán Barbossa y Davy Jones, de una manera que hiciera rememorar lo que hizo que el paseo original fuera favorito entre los visitantes de los parques temáticos de Disney… y con la esperanza de que el segundo film al menos igualara al primero en popularidad.
Pero ni Bruckheimer, ni Verbinski, ni The Walt Disney Studios podrían haber predicho lo que sucedería con el estreno del segundo film de la trilogía Piratas del Caribe: el Cofre de la Muerte, el 7 de julio de 2006. El zeitgeist [espíritu de la época] es una entidad misteriosa, y Piratas dio directo en el blanco, logrando su aceptación y constituyendo instantáneamente a El Cofre de la Muerte en un fenómeno cultural. Con su estreno, durante un fin de semana de tres días, el film arrasó con todo record anterior de taquilla, llegando a la increíble suma de U$S 135.745.219 millones, superando a Spider Man en mas de U$S 20 millones. “Big Booty for Bruckaneers” (Gran Botín para los Brucaneros), fue el título de Daily Vaiety, un diario especializado que con su jerga inigualable, señaló que el récord de ese fin de semana de tres días superó el anterior de un fin de semana de 4 días... que los totales del día viernes, U$S 55,5 millones establecieron una nueva marca en la mayor cifra de un solo día… que el sábado, los U$S 100,2 millones ya habían superado la cifra en bruto de dos días, lo que significaba que El Cofre de la Muerte fue la primera película de la historia en romper la marca de U$S 100 millones en 48 horas. Para entonces, el film ya había adquirido el estátus de un evento mayor, evidenciado por legiones de fans “Piratas” de todo el espectro demográfico, que hacían fila durante horas luciendo una gran variedad de accesorios y vestimenta de bucaneros que parecían recién salidos del foro de filmación.
El Cofre de la Muerte había superado los U$S 200 millones al terminar el segundo fin de semana, a ocho días de su lanzamiento – otro record superado estrepitosamente- acumulando U$S 258,2 millones en solo 10 días, mas los U$S 125 millones adicionales por la recaudación en 24 países fuera de los Estados Unidos y Canadá. Si persistía aun alguna duda de que Piratas no tenía el “mal de mar”, esta ya había sido sepultada hacia el tercer fin de semana de El Cofre de la Muerte, cuando el film se alzó sobre cuatro nuevas realizaciones y se transformó rápidamente en el film que superó la marca de U$S 300 millones en Estados Unidos y Canadá (superando el hito de U$S 305 millones de Piratas del Caribe: la Maldición del Perla Negra.) En el extranjero se abrieron 11 nuevos mercados, con los mismos resultados. Piratas fue número uno en todos lados. Largas colas en Tokio, en Mumbai o en Varsovia. En septiembre de 2006, El Cofre de la Muerte se convirtió en el tercer miembro del club de los mil millones de dólares y el tercer largometraje de la historia con mayor recaudación de taquilla en el mundo. El público se había expresado a su favor a lo largo de todo el mundo. El film también fue honrado con cuatro nominaciones al Premio de la Academia, ganando John Knoll, Charles Gibson, Hal Hickel y Allen Hall, el Oscar a los mejores Efectos Visuales.
Los realizadores sabían que aunque el público había sido cautivado por las dos primeras películas, seguramente necesitaría volver a sentir ese “sorpréndanme” en la tercera y estaban plenamente preparados para cumplir con esas expectativas. “Queríamos contar una historia que fuese una batalla épica entre la libertad y el conformismo”, dice Mike Stenson, el productor ejecutivo. “Una pregunta fundamental en la película es ¿por qué se supone que nos tienen que gustar los piratas? Realmente se trata de volver a sentir que cuando se está creciendo, se quiere ser un pirata... se quiere hacer algo que tenga que ver con la libertad sin reglas, sin relación con la autoridad. A lo largo de nuestras vidas nos enfrentamos con situaciones cada vez más relacionadas con la autoridad y el conformismo... pero eso no significa que no se quiera abandonar el traje y la corbata un sábado por la noche y pasar un par de horas con una versión más oscura, más de capa y espada e independiente, de uno mismo. Creo que esto es lo que suscita la pasión de la gente por esta película.”
“La primera película no estuvo siquiera en la lista de los 10 primeros preestrenos del verano,” agrega Chad Oman productor ejecutivo de Jerry Bruckheimer Films. “Luego El Cofre de la Muerte duplicó nuestras expectativas, lo que fue bastante sorprendente. El problema fue que luego de celebrar debíamos estar a la altura de la situación para PIRATAS DEL CARIBE: EN EL FIN DEL MUNDO.”
“De alguna manera la satisfacción más grande de Piratas es que se ha convertido en una especie de fenómeno cultural adoptado apasionadamente por el público,” dice Bruce Hendricks, productor ejecutivo. “Y el crédito es de Jerry, Gore, Ted y Terry, de Johnny y del elenco. Se ha cambiado para siempre el enfoque del género de películas de piratas, que estaba prácticamente muerto. Ha sido reinventado. Aunque nosotros, o algún otro, hagamos o no más películas de piratas, ya hay una manera diferente de verlos.”
Con el barrido de taquilla en todo el mundo de la secuela El Cofre de la Muerte; las estrellas del film aun estaban procesando el impacto. “Es muy impactante,” admite Johnny Depp. “Aun estoy asombrado de que tanta gente, en tantos rincones del planeta, haya aceptado al film y al Capitán Jack, y que de cierto modo se haya apropiado del personaje. Nunca me había sucedido algo así, pero lo que ha sucedido con Piratas no le ha sucedido a mucha gente. La idea de que el público sienta esta conexión tan fuerte con el Capitán Jack es muy, muy conmovedora y emocionante. Verlos disfrazados a los niños como el personaje y hablando cómo él, es increíble.”
Depp siguió con entusiasmo el desarrollo del viaje del Capitán Jack en PIRATAS DEL CARIBE: EN EL FIN DEL MUNDO. “Cuando vimos por última vez a Jack en El Cofre de la Muerte;” nos explica Depp, “estaba entrando a la boca de Kraken, y cuando lo reencontramos en PIRATAS DEL CARIBE: EN EL FIN DEL MUNDO está en el “Armario” de Davy Jones, que es una especie de mas allá de la idea del purgatorio, una especie de infierno en la que se encuentra rodeado por sí mismo. Me pareció una idea brillante la de no enfrentar a este sujeto con sus demonios, sino con varias facetas de su personalidad.”
“Es una idea muy interesante que Jack Sparrow tenga una veta honesta que sea probablemente su ruina,” agrega el guionista Ted Elliot. “En la primera película lo dice, en la segunda realmente sucede y en esta, la tercera, Jack dice: ‘He dejado esta veta honesta porque ya he visto donde me lleva’. En esto se convierte en la batalla de Jack... ¿qué estas dispuesto a hacer para conseguir lo que quieres?”
“Johnny Depp es un actor sorprendente, inusual y único,” agrega Jerry Bruckheimer, “crea personajes originales y memorables de los que el público se enamora. El Capitán Jack es diferente de todo lo visto anteriormente en las pantallas, un borracho de capa y espada que apenas se puede mantener en pie, sin embargo tan inteligente y astuto, que burla a todos los que lo rodean. Y Johnny lo hace en cada una de sus películas. Ya sea como Willy Wonka en Charlie and the Chocolate Factory, J.M. Barrie en Finding Neverland o en Donnie Brasco, crea algo tan indeleble que uno no sabe cómo hace surgir esa magia.”
Geoffrey Rush, abierto entusiasta de los tres filmes, estaba profundamente encantado de transformarse una vez más en el Capitán Barbosa. “Pienso que El Cofre de la Muerte y EN EL FIN DEL MUNDO son en realidad un solo gran film, con un intervalo en un momento de gran tensión,” aclara. “Lo digo con bastante egocentrismo porque no hago nada en el segundo film; estoy muerto. Pero tengo una fabulosa frase final al final de la película. PIRATAS DEL CARIBE: EN EL FIN DEL MUNDO revela las quince líneas más importantes del argumento que se han ido gestando a lo largo de la primera y la segunda películas, dejando todo perfectamente aclarado.
“Hay un cambio en el personaje de Barbossa en el tercer film,” continúa Rush. “Creo que en El Cofre de la Muerte Davy Jones se vuelve un villano o una fuerza oscura en el centro de la película. Luego de su ausencia, Barbossa regresa como una especie de político, lo que para mí fue maravilloso porque significó que no tuve que actuar los mismos sabores ni trabajar la misma paleta dramática que en el primer film, en el que solo había pura rivalidad con Jack. Eso sigue estando en EN EL FIN DEL MUNDO pero mi trabajo aquí es asegurar que la verdadera herencia romántica de los piratas, como una hermandad de vagabundos del mar, mantenga su identidad frente al despiadado mundo corporativo de la Compañía de Comercio de las Indias Orientales que quiere acabar con ella. Así me transformo en un archi manipulador, funcionando con cualidades que son familiares a Barbossa, como traicionar a la gente y forzarla a hacer cosas que no quieren hacer.”
“Todos estamos aun en la piel de nuestros personajes,” agrega Orlando Bloom, “pero afortunadamente el crecimiento de los personajes es realmente importante el el tercer film. Will Turner tiene definitivamente algunas nuevas aristas. En la segunda película, el conficto principal de Will era optar por su padre o por su amor por Elizabeth. Quiere el oro y el moro. Quiere rescatar a su padre, Bootstrap Bill, y también quiere estar con la chica que ama, pero ellos son polos opuestos que se rechazan uno al otro.
“Cuando PIRATAS DEL CARIBE: EN EL FIN DEL MUNDO comienza,” continúa Bloom, “Will ha adoptado el código pirata que tanto odiaba en el comienzo de La Maldición del Perla Negra, para perseguir sus propios intereses. Había prometido salvar la vida de su padre, y hará todo lo posible para cumplir con ese voto...sin olvidar que aun ama a Elizabeth, deseando volver a formar parte de su vida. La tercera película revela la verdadera naturaleza de los personajes, y es divertido hacer este viaje con Will sin estar muy seguro de qué dirección tomará.”
“Elizabeth siente algo de culpa por haber entregado a Jack al Kraken hacia el final de El Cofre de la Muerte” dice Keira Knightley acerca de su personaje cada vez más decidido y determinado, “pero creo que fue algo que debía hacerse en ese momento. Luego se da cuenta de que lo que realmente necesitan es salvarlo. Elizabeth es más que una chica parada en el rincón a esta altura de la historia. Ha sido fantástico interpretar una mujer tan fuerte e interesante, que no le teme a la lucha.”
“Keira creció a lo largo de estas tres películas hasta convertirse en una mujer,” menciona Jerry Bruckheimer, “y Elizabeth es un personaje que da un giro enorme. Comienza como la hija malcriada de un gobernante y a lo largo de la historia se transforma en una mujer que se opone a las convenciones y se convierte en alguien tan feroz y competitivo como Will y el Capitán Jack.”
Bill Nighy se mostró encantado de llevar a Davy Jones unos pasos mas allá en el tercer film, infundiendo nuevamente una gran porción de reconocible humanidad a su diabólico personaje. “Davy está ahora al servicio de la Compañía de Comercio de las Indias Orientales y de Lord Cutler Becket; es la primera vez que está al servicio de alguien. Ya no es más el libre señor de los mares. En PIRATAS DEL CARIBE: EN EL FIN DEL MUNDO podemos ver cómo el amor y la traición hicieron naufragar su vida y arruinaron su existencia. Sólo quiere a Calypso y calmar su terrible dolor. Su sufrimiento es enorme. Davy es un enamorado y ha sido profundamente herido, devastado por la pérdida de esa mujer. La gente como Davy, que nunca se relacionaba con nadie y cuando lo hace pierde a la persona amada, se quiebra para toda la vida. Son hombres peligrosos que están emocionalmente dañados. Este es un hecho central en la vida de Davy Jones que nunca supera.”
“He compartido ya una larga vida con Gore y es una vida muy agradable,” sonríe Stellan Skarsgård, quien retorna como el maldito padre de Will Turner, Bootstrap Bill. “Lo que es sorprendente, ya que cuando se trabaja en una producción tan grande como esta, se cree que el trabajo frente a una cámara es muy diferente del cine independiente que solía hacer. Pero no lo es, porque frente a la cámara se trabaja en la intimidad, básicamente de la misma manera, con la libertad de probar distintas cosas. Gore no es solo un director técnico, sino que está muy interesado en los actores y en ver lo que ellos pueden dar. Esta es una de las razones por las que quería este trabajo... porque cuando vi La Maldición del Perla Negra, vi a un grupo de actores disfrutando y obviamente divirtiéndose.”
Bootstrap Bill desarrolla un cambio progresivo a lo largo del tercer film. “Es bastante triste ver su deterioro ya tan avanzado. Está quebrándose, y tiene solo recuerdos fugaces e ideas vagas acerca de su relación con las personas. Al igual que otros miembros del a tripulación del El Holandés Errante, Bill se están volviendo cada vez más parte del barco y va perdiendo su humanidad.”
Jack Davenport, compulsivamente agudo, nos explica su personaje James Norrington: “En el final del segundo film, el personaje que estaba creando era un elegante sin techo...pero con el corazón de Davy Jones en la mano. Sé muy bien que me las arreglé para entregar el corazón a la última persona del mundo, mejor dicho de los mares, a quien debería haberlo entregado, pero esto me permitió en el tercer film disfrazarme nuevamente como carroza de carnaval. Me siento mucho más cómodo de azul y amarillo, pero debo ostentar nuevamente la agraciada peluca blanca. La alegría ha sido liberada a nuestro alrededor.”
En un tono algo más serio, Davenport nos dice: “En PIRATAS DEL CARIBE: EN EL FIN DEL MUNDO, Norrington se da cuenta de que ha cometido un terrible error, y tendrá que convivir con ello. Con relación a sus sentimientos hacia Elizabeth, ya no es el mismo cabeza hueca del primer film, lo que creo que es positivo en términos de dar profundidad al personaje. Ella le rompió el corazón, de una manera pública y embarazosa. Por lo tanto, no creo que él albergue una gran ilusión de salir a navegar juntos para ver la puesta del sol. En el tercer film, está mas pendiente del desorden que ha causado y de su oportunidad de redención.”
Tom Hollander, el encantador señor Inglés que interpreta al nada encantador Lord Cutler Beckett, se sintió deslumbrado por el éxito de El Cofre de la Muerte. “Formar parte del tercer film más taquillero de todos los tiempos me hizo sentir como estar junto al hombre que descubrió la penicilina,” bromea. “Fue emocionante, una sensación fantástica. Formar parte de algo que la gente ama es maravilloso. Ha sido un trabajo duro, pero increíble a la vez”. En el tercer film, la sangre fría de Beckett asciende a niveles aun más nefastos. “Davy Jones puede verse como el villano de El Cofre de la Muerte, pero Beckett se convierte en su jefe en EN EL FIN DEL MUNDO; técnicamente hablando estoy en la cima de los villanos”, agrega Hollander. “El corazón de Davy Jones es mi arma secreta, una ventaja estratégica. Porque el que tenga el corazón de Davy Jones controla los mares. Entonces, aunque Beckett no intimida físicamente a Davy Jones, tiene su corazón, que a pesar de ser una cosa asquerosa, desagradable y olorosa, le da todo el poder.”
Bruckheimer y Verbinski sumaron a las estrellas que ya figuraban en los dos filmes anteriores algunas caras nuevas del exterior a EN EL FIN DEL MUNDO: la superestrella internacional Chow Yun-Fat, como el inteligente pirata de Singapur de dos caras. “Queremos contratar a actores de gran talento que estén entre los mejores”, dice Bruckheimer, “y eso define a Chow Yun-Fat. Es un actor dominante, una estrella internacional y un agregado perfecto para la trilogía.”
“Todos eran piratas, y la traición era algo normal,” apunta Chow acerca de su personaje. “Por lo tanto Sao Feng la trata como a una transacción comercial. No existen ni el bien y ni el mal en el mundo de los piratas, y Sao Feng no es ni bueno ni villano. Son todos piratas, y así son ellos.” En relación con el atractivo que ha tenido el film en todo el mundo, Chow nos explica: “Creo que todos tenemos la fantasía de hacer cosas que no puedan ser controladas ni por los padres ni por las autoridades. Los piratas son rebeldes, por eso la película es una atracción en todo el mundo, en especial entre los jóvenes.”
Los veteranos Lee Arenberg y a Mackenzie Crook vuelven a interpretar a los “Piratas” mayores, el dúo de Pintel y Ragetti, en EN ELFIN DEL MUNDO, con una nueva oportunidad para expandir sus personajes. “En el primer film éramos bastante crueles,” dice Crook. “Le disparamos al sirviente del gobernador en su casa sin más, éramos unos villanos despiadados realmente desagradables. En el segundo film nos volvimos un poco más suaves y logramos un dúo de comedia. Pero creo que Gore, Ted y Terry querían que mantuviéramos la veta de crueldad, porque en el fondo somos piratas, y no podemos estar siempre metiendo la pata. Por eso tengo en mi haber una lista de muertos. EN EL FIN DEL MUNDO despacho unas tres o cuatro almas.”
“Éramos los chicos malos graciosos en la primera película y los chicos buenos graciosos en la segunda,” agrega Arenberg. “De aquí en más somos los chicos buenos graciosos, no importa a qué equipo pertenezcamos. No somos inteligentes. Siempre digo que compartimos medio cerebro.”

Toda saga debe tener un comienzo…
...Y para En el Fin del Mundo, ese comienzo fue el 6 de abril de 2005, cuando las primeras escenas del film se comenzaron a grabar en el foro de Tortuga del diseñador de producción Rick Heinrichs construido en Wallilabou Bay en la hermosa y fenomenal isla St. Vincent en las Indias Orientales, pequeño país donde se hicieron las tres películas de Piratas. Irónicamente, la secuencia era a la vez uno de los momentos finales del film. Por supuesto, existía la duda de grabar esta escena simultáneamente con la filmación de El Cofre de la Muerte. Era un desafío producir y dirigir dos películas épicas de alcance masivo al mismo tiempo y que esto fuera desalentador para Jerry Bruckheimer y Gore Verbinski, su equipo de producción y la compañía de actores. Pero el asunto fue que todos contribuyeron. “Cada vez que haces una película es un desafío,” dice Bruckheimer, “pero preparar dos películas al mismo tiempo es un desafío serio. No se tiene el tiempo de preparación necesario para la segunda película luego de terminar la primera.
“Desde el punto de vista de la producción,” continúa, “fue la única manera de hacer la segunda y tercera Piratas. Con Gore Verbinski, que se caracterizó por dirigir estrellas en su primer film y en otros que ha realizado; con Johnny Depp, estrella consagrada, pero que se expandió al gran público con La Maldición del Perla Negra; con Orlando Bloom, quien ya había surgido antes de la primera Piratas y que a partir de ella se convirtió en súper estrella; y con Keira Knightley, quien ha devenido por derecho propio en una fenomenal joven actriz; pensar en tenerlos a todos para las dos películas por separado hubiera tomado de tres a cuatro años entre una y otra, organizando sus agendas y tiempos. La decisión de acotar el tiempo con la realización con dos películas simultáneas fue, tanto para Gore, para los guionistas, como para Ted y Terry – y para el resto del equipo – la única manera de hacerlo.”
Aunque la mayor parte de la filmación de El Cofre de la Muerte fue realizada tanto en St. Vincent como en la siguiente localidad de las Indias Orientales, Dominica, Verbinski supo tomar ventaja de estos exóticos parajes también para En el Fin del Mundo. Un convoy con vehículos de la producción se sacudió a lo largo de caminos a medio construir o apenas construidos para llegar a St. Vincent’s Black Point Beach, una extensión de arena espectacular y fuerte oleaje. En Dominica, se filmaron las primeras tomas en el Perla Negra ahora rediseñado y reconstruido –navegó casi 2.000 millas náuticas desde Steiner Shipyard en Bayou La Batre, Alabama – y se reunió a Johnny Depp y a Geoffrey Rush como su viejo némesis, el Capitán Barbossa. Es aquí en Dominica, en Capucine Point, donde vemos al Black Pearl y a sus pasajeros acercándose a Shipwrek Island, una de las más espectaculares vistas de PIRATAS DELCARIBE: EN EL FIN DEL MUNDO.
A pesar de que en En el Fin del Mundo hay menos tomas de St. Vincent y de Dominica que en El Cofre de la Muerte, Eric McLeod, el productor ejecutivo, señala que “técnicamente este último film se rodó en más escenarios que El Cofre de la Muerte. St. Vincent, Dominica, Las Exumas y la Isla Gran Bahama, así como locaciones en el sur y el centro de California, Hawai y una segunda unidad filmando en Groenlandia y las Cataratas del Niagara. Gore quiere llevar al público en un viaje hasta parajes en los que nunca antes hayan estado.”

Singapur
Como filmar durante el período que va desde Los Piratas del Caribe: el Cofre de la Muerte, seguido por un corte por el verano -para que la enorme cisterna del estudio abierto pudiera ser terminada en la isla de la Gran Bahama- significa tener la parte del león, la escena siguiente no sería filmada sino el 31 de agosto de 2005, con la aparición de Chow Yun-Fat, quien se unió al elenco como el capitán Sao Feng para hacer las escenas en el Escenario 2 de Disney con los foros perfectos de Rick Heinrichs que representan la cabina del pirata de Singapur en su barco, el Empress. Dos días después, empezaron las filmaciones en el mayor foro decorado para PIRATAS DEL CARIBE: EN EL FIN DEL MUNDO y, para muchos, esto representó la apoteosis del talento de Rick Heinrichs y el del departamento completo: una representación íntegra y extravagante del Singapur de principios del siglo XVIII. Construido en un escenario (el 12) en los Estudios Universal, este increíble decorado, que está compuesto por 40 estructuras individuales, fue hecho en la cima de una cisterna de 80 pies por 130 pies, y estaba conformado básicamente por un puerto repleto de cabañas con techo de paja, de las propias del Sudeste Asiático, y casas construidas sobre pilastras (llamadas kampongs), y una franja de ciudad de fábula -con un diseño bastante típico de China-, que incluía un mercado, la calle lateral donde se llevan a cabo toda clase de negocios dudosos y una casa de baños enorme frecuentada (demasiado a menudo, por lo que puede verse) por los piratas locales. Heinrichs diseñó y construyó incluso el área de casuchas que queda por debajo de la casa de baños y en la que los trabajadores mantenían caliente el agua por medio de unos hornos gigantescos. Este era el escenario para una escena crucial del comienzo de PIRATAS DEL CARIBE: EN EL FIN DEL MUNDO, en la que Will, Elizabeth y Barbossa buscan los mapas secretos que los puedan llevar hasta el armario de Davy Jones —es decir, hasta el propio capitán Jack Sparrow, que fue enviado allí al final de Los Piratas del Caribe: el Cofre de la Muerte por Kraken— y que guarda el Señor de los Piratas de Singapur, el capitán Sao Feng. Lo que sigue es una fantástica secuencia de acción que se desarrolla entre el área de la ciudad y las costaneras desvencijadas que están a la orilla del mar, bordeadas de linternas encendidas, que conectan esas casas llamadas kampong sobre pilastras que están encima del puerto, escena en la que los piratas se enfrentan con los soldados de la Compañía de Comercio de las Indias Orientales.
“Singapur es una mezcla de influencias diversas y estilos arquitectónicos que investigamos cuando estábamos estudiando el modo en que debía verse la ciudad por ese entonces”, dice Heinrichs. “Debemos decir que Singapur no aparece particularmente bien documentada sino hasta el siglo XIX, de modo que tuvimos que tomar como referencia una serie de otras ciudades de China. Deliberadamente, decidimos hacer una aproximación llena de fantasía, y creamos algo como un estilo expresionista chino-malayo de lo que imaginamos que debe haber sido Singapur por esos años.
“La casa de baños es un asqueroso ejemplo de la higiene, que escarba en la diversión de la desenfrenada sensibilidad contemporánea manifestada por quienes gustan de ir a los spa”, agrega Heinrichs. “Tenemos un montón de hongos que crecen en las tuberías de madera y, de hecho, los piratas han pasado tanto tiempo vagando alrededor de esos tubos ¡que los hongos también les están creciendo a ellos! No parece que los piratas vayan a dejar sus actitudes roñosas en los barcos… obviamente, las traen consigo a la casa de baños. El tema está en darle ese maravilloso toque nauseabundo para que se vea lo mugrientos y bestiales que son estos piratas. Le agregamos cantidades de espesante y de tintura al agua para que se viera bien real. Y el capitán Sao Feng tiene su propio ‘espacio de héroe’ en la casa de baños, con un dragón imperial en la pared que está detrás. Una de las cosas más divertidas que hicimos fue diseñar todo el piso de la casa de baños para que tuviera un aspecto serpenteante y con tablones, que se viera absolutamente verosímil, por lo que cada tabla tuvo que ser hecha a mano.”
El viejo colaborador de Heinrichs, decorador de sus foros y quien compartió con él las nominaciones al Premio de la Academia por Lemony Snicket’s A Series of Unfortunate Events y por Piratas del Caribe: el Cofre de la Muerte en la categoría de Mejor Dirección de Arte, es Cheryl Carasik. “Ya he hecho cuatro filmes codo a codo con Rick, y la verdad es que tenemos una excelente relación”, dice. “Rick empieza a cocinar el asunto de manera inmediata, de modo que yo tengo información suficiente desde el primer momento de la puesta, como para concentrarme y afinar los detalles de la película.” El foro que armó Carasik para Singapur, la mitad del cual fue importado desde Asia, era una increíble conjunción de canastas, bolsas de granos, alimentos, lámparas chinas que titilan, cajones, baldes, rollos pintados, ropa colgada al sol, todo hecho de rattan, bambú (buena parte de los cuales fue traída por Carasik desde la República Dominicana), madera y hojas de palmera, exactamente como tendría que haber aparecido en el Sudeste Asiático. “Fue uno de los sets más grandes que haya hecho en mi carrera y, probablemente, el más desafiante, gracias al tiempo que me llevó hacerlo”, recuerda Carasik. “Había pequeños rincones, negocitos de farmacia y bazares e interiores que requerían decoración, porque nunca se sabe dónde es que Gore va a querer filmar.”
En cuanto a la atmósfera, el foro de Singapur se sentía efectivamente como del Sudeste Asiático, con una humedad pesada, llena de gotitas producidas por los miles de galones de agua del tanque que se había creado para hacer la zona del puerto, combinada con el calor que emanaba del poderoso equipo de iluminación. ¡Había una bruma visible que se podia percibir en todo momento por encima del nivel del agua!
En el Fin del Mundo presentó nuevos y hasta irresistibles retos para el coordinador de dobles George Marshall Ruge, para el asistente Dan Barringer y para su estupendo equipo de dobles y de extras, que esta vez incluyó un enorme contingente de asiáticos compuesto por expertos en artes marciales de todos los calibres. La secuencia que tiene lugar en Singapur, con el capitán Barbossa, Will Turner, Elizabeth Swann, Gibbs, Tia Dalma, Pintel y Ragetti, Cotton y su loro, Marty, el capitán Sao Feng, Jack el Mono y unos 200 piratas chinos de diversa clase, la milicia de la Compañía de Comercio de las Indias Orientales e incluso ciudadanos comunes de Singapur, echa a la calle a toda esa gente que pulula entre la casa de baños y las arterias y pasadizos de la ciudad, y luego por las costaneras de madera y las callecitas que conectan las chozas con techo de paja con las casas sobre pilastras que están en el puerto. “La secuencia de Singapur empezó como una entidad desconocida y con una línea de descripción en el tratamiento de la obra”, comenta Ruge. “Sin demasiada perspectiva, empezó a tomar proporciones colosales, transformándose muy rápidamente en una secuencia compleja con un decorado difícil. Teníamos un tiempo muy restringido para preparar la acción, diseñarla, hacer la coreografía y ensayar. Como el decorado todavía estaba siendo construido, terminé llamando a ensayar en horarios estrambóticos que se extendían hasta entrada la noche”.
“La parte de la secuencia que se desarrolla en la casa de baños presentó un montón de problemas”, agrega Ruge. “Hacía falta una coreografía de lucha muy compleja en espacios muy reducidos con un cúmulo de gente y un montón de obstáculos propios de los baños. El foro estaba demasiado liso y sumamente resbaladizo, con vapor que salía por todas las grietas. La acción fue diseñada a la medida de los personajes, fresca, intrincada y vigorosa. No había, literalmente, espacio para el error, con disparos y espadas que volaban por todas partes. Una vez que la acción salió de la casa de baños y se metió en las calles de Singapur, apareció otra serie de problemas. Había que diseñar esa acción usando los pasadizos angostísimos hechos con tablas, elevados por encima del agua por medio de andamios de bambú. Eso exigía que los dobles se cayeran al agua desde una altura de ocho a catorce pies, con una mínima profundidad de tres pies y medio y un fondo de concreto.
La solución que Ruge propuso fue tapizar el piso del “mar” con espuma de goma negra. El problema es que la tendencia natural de la espuma de goma es ¡flotar!, de modo que tuvieron que hacerle un montón de agujeros para que la plancha se mantuviera en el fondo.
Chow Yun-Fat, quien ya había hecho varias escenas en la isla de la Gran Bahama, se convirtió en una atracción mayor en el set de Singapur, especialmente para aquellos que lo habían acompañado por años mientras subía los peldaños del estrellato en el cine asiático y también en el norteamericano. “Él siempre dijo que se sentía honrado de estar ahí”, afirma Reggie Lee, quien retrata a Tai Huang, el edecán del capitán Sao Feng. “Esta es una estrella que todos nosotros idolatramos, un hombre tal humilde y tan amistoso con todo el mundo. Su trabajo es espectacular, tiene una altísima ética y gozar de la oportunidad de trabajar con él fue simplemente maravilloso.”
También participaron en la batalla de Singapur unos cuantos ‘actores’ no humanos de la serie Piratas, de la mano del coordinador de animales Boone Narr de Boone’s Animals for Hollywood y del entrenador en jefe Mark Harden, particularmente Jack el Mono, nuevamente representado por Chiquita (hembra) o Pablo (macho), dependiendo de la habilidad que requería la escena. Pero En El Fin Del Mundo, incluso más que sus antecesoras, les dio a Pablo y a Chiquita la posibilidad de brillar como simiosactores, con sus trajes chinos en la secuencia de Singapur, con el robo del Cirio Romano y con el enecendido del cirio durante la batalla con las tropas de la Compañía de Comercio de las Indias Orientales. “Fue una verdadera diversión”, recuerda Harden. “Pablo y Chiquita tenían que sostener una vela encendida y tocar la llama hasta el pabilo. Nos llevó más de 60 tomas que pudieran hacerlo bien. No era solo por los monos, era una convergencia de todo tipo de cosas que salían torcidas. Pero yo estaba feliz. Lo que quiero decir es que todo el mundo me hacía bromas con eso de que hubo que hacer sesenta y seis tomas, ¡pero yo me sentía muy orgulloso de que los monos tuvieran ganas de hacerlo sesenta y seis veces hasta que saliera bien!”
También presentes en el film, cada vez y en cada lugar en que aparece el silencioso Cotton (David Bailie), están Chip o Salsa, los loros que hacen el papel de mascota del pirata. La relación entre Bailie y las aves ¿creció a lo largo de los tres filmes? “Si estuviera en mis manos, eso es lo que habría sucedido. Pero la verdad es que los loros son bastante indiferentes conmigo. ¡Y la gente sólo me reconoce por esas desdichadas criaturas!”

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