"PIRATAS DEL CARIBE: EN EL FIN DEL MUNDO"
de Gore Verbinski


Efectos especiales: los Maelstroms, los capitanes con cara de calamar y las bolas azules…
…Estuvieron todos, y muchos más, en el dominio de John Knoll de Industrial Light + Magic y Charles Gibson, supervisores de efectos especiales, quienes compartieron un Premio de la Academia por su exitoso y ampliamente aclamado trabajo en El Cofre de la Muerte, junto al supervisor de animación Hal Hickel. Para En el Fin del Mundo, otro ganador del Premio de la Academia, John Frazier, se hizo cargo también de muchos de los efectos físicos especiales del film. Knoll, Gibson y Hickel tuvieron poco tiempo para dormirse en los laureles de sus Oscar. Ese fue el ojo de la tormenta precisamente, porque la mañana después de haber recibido los honores por El Cofre de la Muerte en el podio de los Premios de la Academia®, el trío volvió al trabajo con las aproximadamente 2000 tomas de efectos especiales que exigió En el Fin del Mundo.
Incluso en el mundo digital de la actualidad, en el cual todos los filmes parecen gozar de un complejo de efectos CGI, la audiencia y los críticos han elogiado por igual los efectos del filme como un genuino aumento cuantitativo de lo que se debe hacer en la pantalla con la tecnología disponible.
Sin embargo, como siempre, Gore Verbinski y Jerry Bruckheimer esperaban que Knoll y Gibson subieran un poco más la apuesta para En el Fin del Mundo. “Este es un espectáculo muy grande para nosotros”, admite Knoll. “Habrá muchos efectos visuales más que en El Cofre de la Muerte. Y, debido al corto período de postproducción, yo superviso algunos, Charlie Gibson supervisa otros y el resto es repartido entre diversas instalaciones de efectos visuales.
“Habitualmente, cuando se lanza un desafío como este”, prosigue Knoll, “uno piensa ‘Bueno, ¿cómo vamos a hacer para llevar esto a cabo? ¿Hay algún aspecto que no podamos concretar con las herramientas que tenemos?’ Y si lo hay, tengo que hablar con investigación y desarrollo para hacer las modificaciones necesarias y que se puedan hacer las tomas. Lo cierto es que esa situación se produce muy a menudo. En casi todos los filmes hacemos algo nuevo, o hay herramientas que tenemos que modificar.”
Las enormes maquetas en las que Knoll y Gibson debían hacer importantes contribuciones —el armario de Davy Jones, Singapur, el Green Flash y, por supuesto, el gigante Maelstrom en el que se produce el clímax del filme— siempre combinan efectos visuales, mecánicos y ‘en la cámara’. Knoll explica: “Gore cree, y yo acuerdo con él, que es importante tener elementos reales ahí. Cuanto más cosas reales haya, más plausible y realista será el resultado final. Gore siempre quiere traer elementos reales al foro, que sea eso lo que se vea en la cámara, y usar los efectos visuales solo cuando sean necesarios. Y, además, no confiar demasiado en una sola técnica. Así que, por ejemplo, en una toma, tenemos una extensión de fondo que es una miniatura y en otra toma hacemos algo con la computadora. En tanto uno anda cambiando un poco las cosas, la audiencia no logra descubrir el artificio de una técnica en particular y entonces el resultado termina siendo mejor.”
Un aspecto de En el Fin del Mundo que preocupó particularmente a Knoll fue Davy Jones, que, tal como aparece retratado por Bill Nighy y engendrado por el supervisor y el grupo de artistas de ILM, asombró a todos en El Cofre de la Muerte. Para ese filme, Knoll e ILM crearon un sistema de captura del movimiento que llamaron Imocap, sistema que simplifica drásticamente las técnicas previas. En lugar de necesitar 16 cámaras, Knoll y los suyos inventaron un sistema móvil que sólo requiere tres cámaras y trajes, para los actores, que llevan sensores, sin los voluminosos escenarios diferenciados con pantallas azules que eran los pilares del sistema antes de esta invención.
“Davy era nuestro foco principal en el segundo filme, y creo que teníamos toda la tecnología puesta allí. Hal Hickel, nuestro supervisor de animación, y su equipo están familiarizados ya con el personaje, de modo que tenemos un repertorio de trabajo para Davy y para la tripulación del El Holandés Errante. De hecho, el número de 16 tripulantes originales del Dutchman creados para El Cofre de la Muerte fue incrementado en En el Fin del Mundo, particularmente para la secuencia del Maelstrom. Afirma Knoll: “Tomamos algunos de los personajes que estaban más en el fondo en el segundo filme y los llevamos al frente para que se vieran.”
Knoll admite que “de las tres películas, la parte más divertida tuvo que ver con la creación de Davy Jones. Fue una verdadera colaboración con Bill Nighy, quien hizo una actuación fabulosa en el set, y todo sin pruebas de cómo iba a quedar. Le pedimos que usara el inquietante pijama gris para la computadora en el set, y no le pensábamos mostrar cómo iba a quedar finalmente, pero él se metió en el personaje e hizo su estupenda actuación, creó un personaje asombroso y nos dio un material fantástico con el que trabajar. Cuando estuvieron de vuelta en ILM, los artistas hicieron un trabajo maravilloso con el modelado, la textura, la luz y el enlucido, toda una sublime animación. Creo que Davy Jones es un personaje especial en todos los sentidos”.
Para el extraordinariamente desafiante trabajo de postproducción, Knoll explica: “Gracias a la medida del espectáculo y al número de tomas que teníamos para terminar por semana, necesitábamos tener una devolución de Gore regularmente. Entonces, dado que que estaba tan ocupado como nosotros, cuando él estaba editando la película, trabajando en el sonido, el ADR, todos esos toques finales para hacer la película, desde luego que no le venía bien viajar hasta ILM en San Francisco desde Los Angeles. Y, del mismo modo, era como algo muy molesto para mí estar volando regularmente cuando lo que yo tenía que hacer era estar con mi gente en ILM. Así que hacíamos video conferencias dos veces por semana, por lo menos hasta las semanas finales. Pero cuando estábamos llegando al final, hacíamos las videoconferencias ¡todos los días!
“Revisamos todo el trabajo que se está haciendo en una video conferencia de ida y vuelta, para que Gore pueda visualizar la toma en la que estamos trabajando. Como mucho de lo que hacemos se relaciona con gestos que se hacen con la mano y con esa clase de cosas, es importante vernos mutuamente mientras lo estamos llevando a cabo.”
De todos los sitios extraños de los que la compañía de Los Piratas tuvo conocimiento —y Dios sabe que son muchos—, uno de los más raros fue, quizás, el reservorio donde había 175 mil bolas azules de plástico liviano, en dos redes que estaban encima del piso del hangar llamado Site 9 en Palmdale, y encima de la cubierta de la maqueta ladeada del Black Pearl. A decir verdad, se veían como bolas azules, pero eran, en realidad, miles de cangtrejos nerviosos. O, al menos, iban a serlo cuando John Knoll e ILM hubieran terminado con ellas.
Knoll lo explica así: “Hay una escena importante en la secuencia del Maelstrom con cien mil cangrejos que caen encima de toda la cubierta del Black Pearl y barren con todo a su paso, como una especie de avalancha de crustáceos. A Gore se le ocurrió la idea de usar bolas de plástico, como las que se encuentran en los peloteros. Pensó que las bolas golpearían a todos sin lastimarlos gracias a que son tan livianas.
“Yo me habría inclinado por crear eso por medio de dobles digitales”, sigue Knoll, “y por usar una especie de aparejo que tirara abajo a los piratas. Pero a Gore le gusta que se pongan en el set elementos contundentes, para que la cámara filme tanto como se pueda, y que se usen después efectos visuales donde sea necesario.”
“Los cangrejos son modelos generados por computadora. Primero construimos una versión detallada del cangrejo y después hacemos distintas versiones a partir de esa.”
Cuando las bolas caían sobre los actores desde la red, los niveles de madurez del elenco bajaron a, digamos, los propios de niños de cinco o seis años, porque se pusieron a tirarse las bolas unos a otros en todas direcciones encima del Black Pearl… Gore Verbinski, tal vez, el más entusiasmado de todos. Y considerando que ya estaban en el día número 252, es comprensible que trescientas cajas de pelotas azules se convirtieran en el disparador de esa alegría explosiva. “Es sorprendente ver un puñado de hombres y mujeres adultos que se convierten en niños de tres años”, ríe George Marshall Ruge, el coordinador de dobles. “Imagínense, verlo a Orlando Bloom arrojarle una pelota azul a Geoffrey Rush… no tiene parangón. Era como para decir ‘¿No es hora de que los padres vengan a buscar a estos niñitos?’”
Al final, Verbinski buscó combinar lo mejor de lo viejo con una mezcla vigorosa de lo nuevo. Mike Stenson, el productor ejecutivo, afirma: “Los Piratas es una combinación única de los días de ‘Lawrence of Arabia’, cuando uno salía y tomaba todo con la cámara, y la tecnología más reciente. Lamentablemente, no estoy seguro de que la industria del cine pueda sostener esto por mucho tiempo más. Me parece que sería triste si, al final, termináramos filmando todo en estudios cerrados con pantallas verdes y efectos digitales, en lugar de poder salir y filmar lo que efectivamente se ve en el Caribe. Pero, también, algo como el Maelstrom es tan difícil técnicamente, que no se podría haber filmado en un escenario natural, aun sin importar la cantidad de dinero que exigiese. Era necesario hacerlo por medio de efectos.”
Sumado a su enorme trabajo de diseñar y construir las bases de movimiento que se nivelan en el hangar de Palmdale, John Frazier y su equipo de viejos colaboradores fueron los responsables de un número increíble de otros efectos físicos. “Nuestra función como encargados de efectos especiales esllograr todos los efectos relativos al movimiento o a la atmósfera”, afirma este artista, que ha ganado varias veces el Premio de la Academia. “Puede ser que haya humo en el aire, o que debamos decidir el tipo específico de lluvia que quiere Gore, o el viento o el fuego del cañón.” De hecho, la unidad de fuego de Frazier proveyó no menos de 982 libras de polvo negro para la batalla del Maelstrom, además de disparar los cañones unas 1200 veces, ¡mientras los oídos zumbantes del elenco y del equipo dan prueba viviente de la potencia que tienen los altos decibeles de estos efectos físicos!

Utilería: armas, mapas, anillos… o lo que fuera
Ya sean armas de todas las naciones, telescopios inclinados, los anillos de Jack Sparrow, monedas españolas de 8 reales que en verdad parecen desechos, un libro sobre el Código de la Piratería o prácticamente cualquier cosa imaginable del mundo de los piratas, puede confiarse en que el jefe de utilería Kris Peck y su equipo, sea como sea lo podrá conseguir. Con la ayuda del armero Harry Lu y del asesor de Historia Peter Twist, Peck encontró o fabricó una multiplicidad de armas de los piratas de todas las naciones, de la tripulación del El Holandés Errante y de las tropas de la Compañía de Comercio de las Indias Orientales.
Como lo señala primeramente Gore Verbinski, la realización cinematográfica es un arte colaborativo. Y durante los últimos doce años, uno de sus colaboradores más estrechos ha sido James Ward Byrkit, un verdadero hombre orquesta que, aun invisible y (por ahora) desconocido para millones de fanáticos de la trilogía de Piratas, ha realizado indelebles contribuciones al cine en diferentes niveles. El crédito final de Byrkit es el de enigmático “asesor conceptual”, y él mismo lo explica: “Se nos tenía que ocurrir un crédito porque lo que yo hacía excedía los bocetos de historia. Gore y yo comenzamos a trabajar juntos cuando él dirigía comerciales y yo le hacía los bocetos de historia. Luego él comenzó a hacer películas y de tanto en tanto me llamaba; así se fue expandiendo mi trabajo. En el caso de Piratas, conversábamos sobre el guión, la historia, los temas, los personajes, cosas que iban más allá que el tradicional boceto de historia. Lo mejor de los filmes como Piratas del Caribe es que hay mucho espacio para la creatividad”.
Aparte de los más de 3.000 bocetos de historia para El Cofre de la Muerte y En el Fin del Mundo (también fue consultor durante tres semanas en La Maldición del Perla Negra, donde creó el primer boceto del Perla Negra y otros barcos), Byrkit sirvió de enlace entre los diferentes departamentos, como el de diseño de producción, utilería y pre-visualización, colaborando con animatrónica sencilla en las imponentes y complejas secuencias de acción, que sirvió como guía para Verbinski en el foro y más tarde para los efectos visuales de Industrial Light + Magic.
Uno de los proyectos que demuestran concretamente la sinergia entre los artistas de detrás de la escena es el mapa mágico de los encantados reinos que nuestros antihéroes obtienen del jefe de piratas de Singapur, el Capitán Sao Feng, en En el Fin del Mundo, el cual los llevará… no solo al fin del mundo, sino a lugares más distantes y convulsionados. “En julio de 2005 tuvimos una reunión para la que Gore nos convocó a todos”, recuerda Byrkit. “Sabía que necesitaría este enorme mapa, pero no estaba seguro de la forma que tendría; sólo sabía que debería ser muy especial, nunca antes visto. También quería que el mapa tuviera secretos, que quizás cambiara de forma y que revelase cosas. Se nos ocurrieron cosas tan variadas como un libro con relieves que al ser presionado en el centro surgiese como una lámpara china, o que si se lo alumbrara por debajo proyectara todo el universo como un planetario, en el techo o en las paredes. Yo llevé unas lámparas chinas y traté de pintar en ellas un globo terráqueo y me pasé una semana viendo si funcionaría o no. Y después de todo ese trabajo, me di cuenta de que no iba a funcionar. Entonces volví a una idea anterior, la de un mapa circular con anillos que representaran lugares metafóricos a los que se podía viajar, que me parecía vinculado con el tema general de Piratas. Gore y yo habíamos estado hablando acerca de la idea de que Piratas del Caribe ocurre en una época histórica en la que los mapas todavía no estaban completos, es decir que cualquier cosa en el mundo era posible. Existían consignados esos lugares llamados Terra Incognita (tierras desconocidas) que podían tener monstruos, magia, nuevas civilizaciones. Me encantaba la idea de que este mapa fuera muy antiguo, de antes del Iluminismo (la época en que los mapas se hicieron de manera científica), cuando la realidad geográfica se mezclaba con metafóricos viajes interiores que eran tan importantes como los viajes físicos”.
Y continúa: “Cuando le enseñé el modelo del mapa circular a Gore, él dijo: ‘¡Eso es! Pero que no solo los anillos se muevan, también deben aparecer formas y masas de tierra que se conviertan en formas’. Volví a trabajarlo sobre la base que me había dado Gore y pinté un mapa final que me llevó varios meses, dado que iba evolucionando. Los anillos pueden alinearse de maneras infinitas, como una cerradura de combinación, y cada una de estas combinaciones revela nuevos secretos, algún lugar inexplorado, o metafórico, o un universo paralelo. Llevó como siete u ocho meses armarlo, probarlo y ajustarlo. Tenía cientos de frases y nombres de lugares que debían ser traducidos a la caligrafía china, de modo que el jefe de utilería Kris Peck trajo a un experto llamado J.C. Brown, quien había trabajado en filmes como The Last Samurai y Memoirs of a Geisha, para asegurarnos de que las pinceladas estuvieran bien hechas. La pintura original estaba realizada en washi —papel de arroz japonés hecho a manor— al que le hice un tratamiento de capas de acuarela, acrílico y tintas artísticas. Tenía una cualidad sorprendente, translúcida, y se podría decir que histórica. A lo largo de los siglos, los piratas le fueron agregando sus secretos, escribieron mensajes, en fin, misterios ilimitados en ese mapa”.
El mapa final, barnizado con la pátina del tiempo, fue convertido por Peck en una verdadera pieza de utilería y se creó la mecánica que hacía girar los anillos de manera completamente “práctica”, con realces de CGI. “Los mecanismos interiores del mapa son realmente bellos, como los del reloj del abuelo”, se entusiasma Byrkit.
El mapa exhibe no solo poéticos nombres escritos en caracteres chinos, como “Fantasmas de Almas Perdidas en el Mar para Ser Guiados a Través del Pasaje Acuático”, “Marineros Olvidados Duermen con los Ojos Abiertos Soñando con la Muerte en Agua Salada” o “El Hombre Rico No Encuentra Esperanza de Continuar la Vida – La Muerte Siempre Será una Escalera”, sino pinturas de diversas criaturas tanto reales como mitológicas, por ejemplo un dragón, un tigre y un pequeño animalito que podría ser una versión temprana del adorable ratón más legendario del mundo. Pero cuando se le pregunta sobre esto a Byrkit, él sonríe maliciosamente y dice: “En el mapa hay secretos que van más allá de mi comprensión”.
Como lo señala la diseñadora de vestuario Penny Rose, la apariencia indeleble de bohemio pirata del Capitán Sparrow nunca cambia, desde La Maldición del Perla Negra hasta En el Fin del Mundo. Bueno, casi nunca: basta mirar las expresivas manos en movimiento del Capitán para darse cuenta de que a lo largo de los filmes, los anillos de sus manos (si no de sus pies) han pasado de ser uno a cuatro.
Luego de conversarlo, Johnny Depp y Penny Rose decidieron que el Capitán Jack solía tener relación con algunas damas, a veces muy ricas, otras viudas, otras con sus esposos a la distancia. Entonces, de vez en cuando, Witty Jack (como lo llama Tia Dalma) incursionaba en sus joyas y tomaba, digámoslo así, un souvenir como recuerdo del romántico encuentro. Kris Peck fue el encargado de proveer estos elementos, los cuales eran cuidadosamente elegidos por Depp de acuerdo con lo que le parecía que el Capitán Jack exhibiría como parte de su couture general.
“El anillo original que usé en La Maldición del Perla Negra , con las pequeñas calaveras, lo encontré hace 17 años en un negocio de segunda mano”, recuerda Depp del anillo que el Capitán Jack usa en el índice de su mano derecha. En el anular de la izquierda, lleva un anillo negro y de oro con tres diamantes y un diseño floral, decididamente femenino e indudablemente un recuerdo de una noche con una elegante dama (para Depp había sido una viuda española). Lo que Peck llama “el anillo del dragón”, una joya de gran tamaño con un gracioso dragón de oro de alas desplegadas y engarzadas en jade, es el del índice izquierdo. Sin embargo, en El Cofre de la Muerte, mientras examina cuidadosamente los tesoros de Tïa Dalma en su choza del pantano, El Capitán considera cambiar el anillo del dragón por uno con una gran piedra violácea en una sólida base de oro… pero decide en cambio tomarlo con sigilo y lo desliza en su índice izquierdo, por lo que el dragón se desplaza hacia el pulgar izquierdo. Son entonces cuatro las piezas que adornan sus movimientos con las manos.
El anillo violáceo fue artísticamente re-creado por Kris Peck a partir de un original de 2.400 años propiedad de Johnny Depp hasta que intervinieron los Hados… y se perdió durante la fillmación de El Cofre de la Muerte. ¡Parece que no solo el Capitán Jack tiene los dedos rápidos!

Lo último del Capitán Jack: el final de la producción
Durante los dos últimos días de filmación de El Cofre de la Muerte y En el Fin del Mundo, el entorno normalmente bullicioso del hangar del “Ste 9” cambió por una atmósfera silenciosa, casi de catedral. Solo Johnny Depp estaba trabajando esos días –los cientos de extras y los dobles de riesgo que normalmante poblaban el foro estaban de franco– y todo lucía notablemente pacífico y callado.
Los rostros de los integrantes del equipo se veían confundidos; todos se daban cuenta de que increíblemente, la inminente partida de Depp era la prueba de que la filmación se acercaba a su inexorable final. “No es un trabajo, es un estilo de vida”, era lo que se oía en la compañía. “Uno se levanta, se viste, se va con los piratas durante 12 ó 14 horas al día, semana tras semana, mes tras mes… año tras año”.
Si bien Depp terminó con su escena cerca del mediodía, inició un compás de espera hasta que Gore Verbinski decidiera si el metraje realizado el día anterior era apto para ser procesado en el laboratorio. Seis horas más tarde, comunicó que todo estaba en orden… lo que significaba que Johnny Depp había quedado libre y podría partir.
Luego de cuatro años, un mes y ocho días desde que comenzó la filmación de La Maldición del Perla Negra, Depp no estaba seguro de querer irse. “La posibilidad de decirle adiós al Capitán Jack quizás para siempre no es algo que desee”, había dicho un mes atrás mientras filmaba en el Rancho Rancho Guadalupe Dunes cerca de Santa Maria, California. “Pero si es así, estuvo muy bueno. Sé que el Capitán Jack siempre me hará sonreír. Piratas ha hecho mucho por mí, de todas las formas imaginables. Pero lo más importante es el goce intenso y puro que me hizo sentir. Interpretar a este personaje, ser este personaje y brindar este personaje traerá una sonrisa a mi rostro… y siempre me hará sentir orgulloso y feliz.”
En el hangar había una enorme torta que parecía la torta de cumpleaños para un niño fanático de los piratas, repleta de figuras y barquitos, con una leyenda que decía:
QUERIDO CAPITÁN JACK
QUE TU BRÚJULA SIEMPRE
TE TRAIGA DE VUELTA CON NOSOTROS
GRACIAS
El grupo estalló en aplausos cuando Depp entró en el hangar. “Voy a ser muy breve porque me puedo largar a llorar”, les dijo a sus amigos y camaradas. “Chicos, ustedes hicieron de esta la experiencia más magnífica de mi vida, con excepción del nacimiento de mis hijos. Iría a la guerrra con cualquiera de ustedes. Voy a llamar a esto una pausa, un intervalo… Ya nos ha ocurrido antes, ¿verdad? No siento que pueda decir adiós… a ninguno de ustedes ni al Capitán Jack. Gracias por este paseo”.

Despedida en Hawaii
“Aloha Oe” fue la canción de despedida escrita por la Reina Liliuokalani, la amada última monarca de Hawaii. De modo que quizás era lo justo que los últimos días de la fotografía principal se llevaran a cabo en una de las más bellas islas de ese magnífico reino. Luego de una nueva pausa de Navidad y Año Nuevo, un equipo reducido, junto con Orlando Bloom y Keira Knightley, voló la segunda semana de enero de 2007 a la última locación: las magníficas islas de Maui y Molokai en la exquisita cadena hawaiana. Dada la necesidad de un sitio dramáticamente tropical, Bruckheimer, Verbinski y el diseñador de producción Rick Heinrichs decidieron que sería mucho más fácil encontrarlo en Hawaii, luego de un vuelo relativamente rápido de 5 horas y media , más que volar 10 horas a las Indias Occidentales. Los buscadores de locaciones Laura Sode-Matteson y Val Kim Very (quienes viven en Los Angeles pero son de Hawaii) habían encontrado locaciones muy remotas en Maui y en la cercana Molokai, a solo 15 minutos de vuelo de la isla más turística y poblada. Como siempre, las impredecibles condiciones meteorológicas los acompañaron hasta el final, ya que el cielo de Maui permaneció dramáticamente encapotado a lo largo del día de la filmación, con ocasionales chaparrones. Sin embargo, la accidentada línea costera elegida por Verbinski y las amenazantes nubes conformaron el telón de fondo perfecto para la escena.
Los integrantes del equipo que tuvieron la suerte de ir en el lado izquierdo del pequeño avión que los llevó desde Maui hasta Molokai se sorprendieron ante la vista de los acantilados marítimos más altos del mundo, así como de la ubicación frente al océano de Kalaupapa, la colonia leprosario que todavía existe y que fue atendida por el legendario Padre Damián (quien a la sazón murió contagiado de lepra). La tranquila Molokai es tambiénun refugio de la tradicional cultura hawaiana, conservada con orgullo por sus hospitalarios habitantes.
Los dos días en Molokai alternaron las nubes con el sol brillante. Sin embargo, la locación de la playa, sembrada de puntiagudas y negras rocas volcánicas, estaba a cerca de una milla de la ruta más cercana, de modo que el acceso era difícil. A tal punto que el experto piloto David Paris, quien usualmente estaba a cargo de las tomas aéreas, esta vez también utilizó el helicóptero como medio de carga del pesado equipamiento. “Gore prioriza lo visual”, señala Jerry Bruckheimer, “y nunca toma el camino fácil. Siempre busca lo espectacular, lo nunca antes visto, así que cuando fuimos a Molokai, deseaba encontrar un lugar adonde resultara casi imposible llevar las cámaras y el equipo”.
El primer asistente de dirección Dave Venghaus agrega: “Fue un operativo muy bueno, seguro y bien realizado. Todos colaboraron al descargar el equipo en la playa y fue divertido; a´si debe hacerse. La logística fue muy difícil, pero lo interesante y formidable fue ver a nuestro reparto y equipo escalar las rocas volcánicas”.
Pero como siempre, no hubo obstáculos para que Verbinski completara su día número 272 de fotografía principal combinada de El Cofre de la Muerte y En el Fin del Mundo (serían 284 días si se contaran las filmaciones pre-principales), el 10 de enero de 2007, un mes y medio antes de cumplirse los dos años del comienzo de la filmación, el 23 de febrero de 2005. El final fue celebrado de manera especial cuando los cálidos nativos imbuidos de aloha, agasajaron a la compañía entera con una verdadera luau casera, repleta de leis de flores, un cochinillo asado en imu (hormo subterráneo de roca de lava), comidas tradicionales como poi y haupia, y una interpretación entusiasmada de los jóvenes y integrantes del halau local (escuela de hula).
Era un merecido regalo a la compañía que había soportado las condiciones incómodas de filmación como el clima, la falta de confort, la geografía, el alejamiento de la familia y de la casa, y que casi nunca flaqueó en el curso de los casi 300 días de filmación. “Supongo que Darwin escribía sobre esto”, bromeaba Gore Verbinski mientras observaba a los sobrevivientes –los que permanecieron desde el primer día de filmación en febrero de 2005— en el almuerzo en la carpa, el último día de producción en enero de 2007.
Para Gore Verbinski y Jerry Bruckheimer, el final de la filmación señaló el comienzo de una agenda tremendamente intensiva de cuatro meses y medio de post-producción, 24 horas al día los siete días de la semana, junto a los editores Craig Wood y Stephen Rivkin, los supervisors de efectos visuales John Knoll yd Charlie Gibson, el equipo del editor supervisor de sonido/ diseñador Christopher Boyes (premiado con el Oscar), el editor supervisor de sonido George Watters II, los mezcladores de sonido Paul Massey y Boyes (nominados en dos diferentes categorías por El Cofre de la Muerte) y un ejército de artistas técnicos. Una vez más al igual que en los dos filmes precedentes de Piratas y en varios filmes de Bruckheimer y Verbinski, Hans Zimmer compuso la música. “Hans es uno de esos artistas que siempre aportan algo fresco, singular y diferente”, elogia Bruckheimer. “Es un compositor brillante que tiene maravillosas melodías en la cabeza. Hoy, escuchamos por todas partes el tema de Piratas, y para En el Fin del Mundo creó varios motivos y melodías nuevos, así como el tema de amor. Es maravilloso verlo a Hans en las sesiones de grabación, con 80 músicos. Habla con cada uno de los violinistas y les dice exactamente el tono y la sensación que desea para cada nota”.
En cuanto a la apretada agenda del director, Bruckheimer bromea: “Gore ha pasado tanto tiempo haciendo estas películas sin descanso que no estoy seguro de que recuerde el nombre de sus hijos. Es un profesional consumado y muy perfeccionista, de modo que cada cuadro demanda por completo su atención. Es la clase de director con el que uno desea trabajar”.
Dos años es mucho en la vida de cualquiera, y para el reparto y el equipo que había transitado una maratón de 284 días de rodaje, entre El Cofre de la Muerte y En el Fin del Mundo, la finalización significaba una mezcla de emociones. “Estoy orgulloso del recorrido que hemos hecho en estas dos películas”, declara el productor ejecutivo Eric McLeod. “Son una gran parte de nuestras vidas y creo que al final, el equipo recordará los sacrificios que hicieron y sentirán que valieron la pena, porque un film como este no es un trabajo. Se logra junto a un grupo de gente y todos nos van a preguntar sobre esta experiencia en los años futuros. Contaremos historias sobre cómo fue trabajar en el segundo y el tercer film de Piratas del Caribe. Para sobrevivir durante estos dos años, hubo que llevarse bien con los demás y ser capaz de lidiar con los cambios constantes. Mucha gente fue y vino en estos dos filmes… en total fueron 4.000 personas en las dos películas, pero hay un núcleo de gente que permaneció todo el tiempo. Estos eran filmes que habrían podido agotarnos si no nos hubiésemos concentrado y seguido siempre adelante”.
El gerente de producción de unidad Doug Merrifield agrega: “Nuestro equipo cuenta con los mejores de la industria del cine, realmente lo mejor. Hay cierta clase de equipos necesarios para llevar adelante estas grandes películas y por cierto nosotros contamos con ellos en todos los departamenteos”. Y no se olvida del reparto: “Fue una película muy exigente en lo físico y dos años es mucho tiempo para mantenerse en el personaje”.
Para Mackenzie Crook: “Ha sido un pedazo de mi vida. No fue simplemente un trabajo como el que realicé en otros filmes. Es la ‘época de Piratas’ de mi vida, como mi infancia o mi juventud. Y Martin Klebba agrega: “Va a ser como romper con mi novia”. Naomi Harris observa: “En el foro no hay egos, todos están a la par y se crea una agradable atmósfera de trabajo. Con todos los efectos especiales y las escenas de riesgo, a veces el rodaje fue especialmente difícil, pero lo bueno es que todos trabajaron juntos y se esforzaron. También es lindo hacer una película que mi hermano de 11 años y mi hermana de 7 puedan ver y disfrutar junto a la familia. Para mí, eso significa más que romper los récords de taquilla”.
Por su parte, Chow Yun-Fat confiesa: “Dado que soy fanático de las dos primeras películas de Piratas, cuando llegó el momento de trabajar con Johnny, Geoffrey, Keira y Orlando me sentí como un niño caminando en sueños. Me dio un gran placer y me sentí muy feliz”.
Jack Davenport observa: “Fue una odisea, una experiencia irrepetible, el fin de una era en términos de realización cinematográfica. Tiene una especie de factor ‘Apocalypse Now’. Creo que para mí lo más preciado de este trabajo fue observar cómo el equipo respondió a las demandas artísticas y logísticas. Va más allá de todo lo que yo haya visto en realizaciones en toda mi vida”.
Y otra vez, los actores no hicieron más que elogiar a su temerario líder, el director Gore Verbinski.
“Honestamente, no sé cómo Gore se mantiene en pie luego de todo lo que ha realizado”, dice Johnny Depp de su director. “Todo lo que retiene en la mente… es extraño. La verdad es que, como actor, uno casi podía no leer el guión y confiar en Gore. Nunca te iba a guiar mal; sabe exactamente cada punto que hay que realizar. Simplemente es un mago: es alucinante lo que él es capaz de hacer”.
“Gore es uno de los grandes directores con los que he trabajado”, expresa Bill Nighy, quien seguramente sabe lo que dice luego de su prolongada carrera internacional en el teatro y en el cine. “Cada actor del film te dirá lo mismo. Nada se le pasa en términos de autenticidad de la interpretación y él sabe que no importa cuántos efectos especiales pueda haber, cuántos paisajes bellos o barcos; lo que importa es que haya dos personas que se comunican. No solo es capaz de señalar lo que no está bien, sino que verdaderamente te ayuda. Todo lo que pueda decir de él será insuficiente”.
“Gore nunca deja de sorprenderme con su energía y capacidad de concentración”; describe Mackenzie Crook. “En este, que debe de ser uno de los proyectos cinematográficos más complicados, con dos argumentos increíbles y dos películas impulsadas por sus personajes al mismo tiempo, había días en los que hacíamos una escena de El Cofre de la Muerte por la mañana y otra de En el Fin del Mundo por la tarde, o viceversa. En todo momento él sabía lo que venía antes o después de la escena que estábamos rodando, y dónde debíamos estar emocionalmente, aun cuando nosotros lo olvidáramos… Algo que me pasaba a menudo”.
“Yo diría que el equipo con el que contamos en las dos películas, muchos de cuyos integrantes ya habían estado en la primera, es el mejor de Hollywood. Todos son número 1”, asegura el guionista Terry Rossio. Y su socio en la escritura Ted Elliot agrega: “Gore es na súper estrella, el alma y el corazón de toda la producción. Posee habilidades que parecen imposibles de encontrar: nunca he visto con tanta profundidad a la persona indicada en el lugar indicado como a Gore en estos filmes. Su habilidad para hacer varias tareas, su experiencia en los mundos de la actuación, de la escritura, de la fotografía, de la política de estudio, van más alla de las capacidades de las personas normales. ¡Este muchacho es un alienígena!”
“Gore se levanta cada mañana como si fuera el primer día de filmación”, describe el productor ejecutivo Chad Oman. “Así que aunque estemos en el día 100 ó 200, el está tan entusiasmado como si fuera el primero. Corre por el foro como un niño alentando a todos, tratando de lograr lo mejor del equipo y del elenco. Es muy inteligente, si no la más inteligente de las personas con las que he trabajado en cualquier campo. Y al mismo tiempo, posee una gran sensibilidad artística. Ted y Terry sentaron las bases del tono, y luego esto pasó por el filtro de Gore, con su interesante intelectualidad y su absurda sensibilidad”. Y Mike Stenson agrega: “Gore es un absoluto perfeccionista. Cualquier director que llega a ese nivel de éxito debe poseer una especie de planta de mini-poder nuclear que lo hace seguir adelante”.
Para el primer asistente de dirección Dave Venghaus, “Gore aporta al foro una energía que resulta adictiva. Quiere lo mejor, no solo para el film sino para todos nosotros. Nunca lo vi sentado y está involucrado en todos los aspectos de la filmación. Jamás corre a esconderse en su trailer, sino que está en el foro desde el comienzo hasta el fin de la jormada, mojándose y ensuciándose con nosotros. Se zambule y quiere que tú estés junto a él, que te anticipes y que des el 200 por ciento”.
Todos estaban contentos de haber pasado un fragmento de sus vidas en el mundo de un film de Jerry Bruckheimer.
“Jerry es una especie de Gran Protector”, explica Johnny Depp. “Ahuyenta todos los espíritus malignos. Y si hubo alguien que puso todo en juego al principio, ese fue Jerry. Como actor, uno llega y hace su parte; si funciona, funciona, y si no, pasamos a otra cosa. El que asumió el riesgo fue Jerry”.
Orlando Bloom agrega: “Es gracioso, porque Jerry es un ‘monstruo’, un gigante de la industria, pero también es un compañero, un buen tipo con una cantidad de trabajo detrás de sí, pero que ama su trabajo y la vida”. Y dice al respecto Lee Arenberg: “Jerry es el último verdadero productor / narrador de Hollywood en tanto que permite que sus realizadores sean los que logran las cosas. Es como el mejor jugador de póker del mundo, el que tiene todas las cartas pero sabe cuándo utilizarlas”.
“Lo grandioso de Jerry es la calma”, observa Eric McLeod. “Es decir, un film como este es un torbellino, pero Jerry es la persona más tranquila en el foro. Y además es accessible, ya que siempre puedes acudir a él cuando hay un problema. Probablemente sea quien más ha estado haciendo grandes filmes como este en la historia del cine y tiene un mundo de experiencia y de conocimiento sobre cómo las cosas van a funcionar al final”.
Para el productor ejecutivo Mike Stenson, “Jerry es como un gran entrenador de la NBA. Reúne a un equipo de estrellas, obtiene lo mejor de cada uno e indica las jugadas. Tiende a involucrarse más prácticamente que la mayoría de los productores, por lo cual, cuando ves el conjunto de sus trabajos a lo largo de 25 años, encuentras en ello una cierta sensibilidad”.
“Fue todo un recorrido”, murmura George Marshall Ruge. “Era una sensación extraña la de llegar al final, porque todos nos habíamos familiarizado y habíamos puesto mucha emoción y alma en este proyecto. Por un lado fue un alivio, porque a ese ritmo y con la longitud del rodaje, finalmemente íbamos a decaer, pero también era muy triste dejar nuestra ‘casa de Piratas’. Espero que podamos reunirnos muchas veces en el futuro y que nuestros caminos se crucen. Es un momento de reflexión, de orgullo por lo que hicimos, triste, feliz, aliviado y con la esperanza de volver a reunirnos. En un momento, Jerry se me acercó y me dijo: ‘Bastante grande, ¿no?’ Y yo le contesté: ‘Sí, a partir de aquí todo es ya cuesta abajo’. Con una sonrisa, él agregó: ‘Eso es lo que me dijeron cuando hice Beverly Hills Cop.”
Al final, como explica Bruckheimer, todo se reduce a la razón que lleva al público al cine, que casi no ha cambiado a pesar de los enormes saltos de tecnología desde la época en que el público miraba azorado los efectos especiales de los hermanos Melies en los albores del siglo XX, reaccionaba bulliciosamente ante las hazañas cómicas de Charlie Chaplin y Buster Keaton, o permanecía ansioso en sus butacas ante las fantásticas hazañas de imparable acción de Douglas Fairbanks y Errol Flynn.
Así lo expresa: “Nuestro mayor desafío con En el Fin del Mundo es entretener al público y asegurarnos de que la pase muy bien. Este film es aun más intrincado que La Maldición del Perla Negra y El Cofre de la Muerte: tiene enormes batallas, giros de los personajes, romance y humor. Es todo lo que justifica que hagamos películas y posee todos los elementos por los cuales la gente sigue yendo al cine desde hace más de cien años. Queremos llevar a los espectadores al mundo mágico de la pantalla, a lugares donde nunca antes han estado junto a personajes de los que se enamoran; y que al final se sientan un poco mejor que cuando entraron en el cine”.

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EL REPARTO

JOHNNY DEPP (Capitán Jack Sparrow) vuelve a interpretar el papel del Capitán Jack Sparrow, que lo hizo merecedor a nominaciones al Premio de la Academia y dos veces al Golden Globe en PIRATAS DEL CARIBE: EN EL FIN DEL MUNDO. Recibió una nominación al BAFTA y el premio Screen Actors Guild por este papel en Piratas del Caribe: la Maldición del Perla Negra, y otra nominación al Golden Globe por Piratas del Caribe: el Cofre de la Muerte.
Depp cosechó elogios tanto del público como de la crítica por su trabajo único en una variedad de filmes memorables. Recientemente colaboró con el director Tim Burton, por cuarta y quinta vez, en Charlie and the Chocolate Factory (que hizo merecedor a Depp a la nominación al Golden Globe al Mejor Actor en Comedia o Musical) y en Tim Burton’s Corpse Bride (film nominado al Premio de la Academia 2005 al Mejor Film Animado). Basado en el amado clásico de Roald Dahl, Depp interpretó al excéntrico chocolatero Willy Wonka en Charlie and the Chocolate Factory, un éxito de la crítica y de la taquilla internacionales. En Tim Burton’s Corpse Bride, un film altamente imaginativo y uno de los estrenos más celebrados del año pasado, Depp prestó su voz al personaje principal Victor Van Dort. Y en franco contraste, recientemente protagonizó junto a John Malkovich y Samantha Morton The Libertine, de Laurence Dunmore, en el papel del poeta mujeriego del Siglo XVII John Wilmot, Duque de Rochester. lUego de completar su trabajo para En el Fin del Mundo, comenzó a prepararse para el papel principal de Sweeney Todd, nuevamente dirigido por Tim Burton del afamado musical acerca de la hazañas de “el demoníaco barbero de Fleet Street.”
Depp recibió una nominación al Premio de la Academia, al Golden Globe, el Screen Actors Guild y al BAFTA por su papel protagónico del escritor J.M. Barrie en Finding Neverland, de Mark Forster, junto a Kate Winslet y Freddie Highmore.
Entre los restantes créditos de Depp se cuentan Secret Window, de David Koepp; Once Upon a Time in Mexico, de Robert Rodriguez; From Hell, de Albert and Allen Hughes; Blow, de Ted Demme; la comedia romántica de Lasse Hallstrom Chocolat; Before Night Falls, de Julian Schnabel; The Man Who Cried, de Sally Potter; Sleepy Hollow, de Tim Burton; The Ninth Gate, de Roman Polanski; y Fear and Loathing in Las Vegas, de Terry Gilliam.
Consagrado como el “Mejor Actor” de su generación por su actuación en la película Donnie Brasco, que protagonizó junto a Al Pacino y en la que fue dirigido por Mike Newell, Depp también trabajó en Dead Man, dirigido por Jim Jarmusch, y en Don Juan DeMarco, de Jeremy Leven, donde representó a un hombre convencido de que es el amante más grande de la Tierra, junto a actores de la talla de Marlon Brando y Faye Dunaway.
Pero fue su sobresaliente actuación en el papel protagónico de la película de Tim Burton Edward Scissorhands lo que lo puso en el lugar de uno de los talentos más buscados de Hollywood y le valió una nominación al Golden Globe como Mejor Actor. Fue luego honrado con una segunda nominación al Golden Globe por su actuación en Benny & Joon, una historia de amor dirigida por Jeremiah S. Chechik. Depp volvió a reunirse con Tim Burton para Ed Wood, y su actuación en este filme le valió la tercera nominación al Golden Globe como Mejor Actor. Otros filmes suyos incluyen What’s Eating Gilbert Grape?, dirigido por Lasse Hallström, Arizona Dream, dirigido por Emir Kusturica, y Nick of Time, de John Badham.
Este actor nació en Kentucky y se crió en Florida, donde comenzó a desarrollar un precoz interés por la música. Tras unirse a una banda de rock llamada Kids, Depp consiguió un éxito regional considerable, y siguió al grupo finalmente hasta Los Angeles. Cuando la banda se desarmó poco tiempo después, siguiendo el consejo de un amigo, Depp decidió dedicarse a la actuación. No pasó mucho tiempo hasta que consiguió su primer papel destacado como actor en Nightmare on Elm Street. Siguió trabajando en papeles destacados en muchas otras películas, como Platoon, de Oliver Stone, ganadora de un Premio de la Academia. Entonces, Depp obtuvo el papel que terminaría siendo su plataforma de lanzamiento, como el detective secreto Tim Hanson en la popular serie de televisión de Fox, 21 Jump Street. Protagonizó la serie por cuatro temporadas antes de pasar a la pantalla grande en el protagónico de la película Cry-Baby de John Waters.
Depp entonces protagonizó e hizo su primer largometraje como director junto a Marlon Brando en The Brave, film basado en la novela de Gregory Mc Donald en el que, además, escribió el guión junto a su hermano, D.P.Depp.

ORLANDO BLOOM (Will Turner) repite su papel de Will Turner junto a Johnny Depp y Keira Knightley en PIRATAS DEL CARIBE: EN EL FIN DEL MUNDO. El actor cautivó tanto al público como a los realizadores con su retrato de Legolas en la trilogía de Peter Jackson ganadora de varios premios, The Lord of the Rings, sobre las celebradas adaptaciones de la obra de J.R.R. Tolkien: The Fellowship of the Ring, The Two Towers y The Return of the King. Protagonizó el film independiente de Frank E. Flowers Haven, del cual realizó también la producción ejecutiva.
Luego de trabajar con Ridley Scott en Black Hawk Down, Bloom volvió a reunirse con el director para protagonizar su drama épico sobre las Cruzadas, Kingdom of Heaven. Y a este trabajo le sucedió su primer papel contemporáneo en los Estados Unidos junto a Kirsten Dunst en Elizabethtown, de Cameron Crowe. Otros de sus créditos en el cine comprenden Ned Kelly, con Heath Ledger, y Troy, de Wolfgang Petersen, con Brad Pitt yEric Bana.
Bloom nació en Canterbury, Inglaterra. Se unió al National Youth Theatre y ganó una beca para formarse en la British American Drama Academy. Tras completar esa beca, debutó en el cine en Wilde, de la BBC, protagonizada por Jude Law.
Posteriormente fue aceptado en la Guildhall School of Music and Drama en Londres y durante sus cuatro años de permanencia allí, actuó en diversas producciones como Little Me, A Month in the Country, Peer Gynt, Mephisto y Twelfth Night. Luego de su graduación, el entonces desconocido Bloom fue elegido para el papel que lanzaría su carrera.

La carrera relativamente breve pero notable de la actriz de 22 años KEIRA KNIGHTLEY (Elizabeth Swann) ha culminado hasta ahora con las nominaciones 2005 al Premio de la Academia y al Golden Globe a la Mejor Actriz por su luminosa interpretación, internacionalmente elogiada, de Elizabeth Bennet en la adaptación al cine de la novela de Jane Austin Pride & Prejudice, dirigida por Joe Wright.
Los celebrados trabajos logrados por la joven Knightley demostraron no solo su extraordinaria versatilidad, sino también un espíritu artísticamente aventurero al elegir una amplia gama de proyectos en diversos géneros.
Knightley se hizo un lugar en los titulares con el éxito de Gurinder Chadha Bend It Like Beckham, donde interpretó a la joven jugadora de fútbol Jules Paxton, junto a Parminder K. Nagra. Luego fue elegida por el director Gore Verbinski y el productor Jerry Bruckheimer para interpretar a Elizabeth Swann junto a Johnny Depp como el Capitán Jack Sparrow, Orlando Bloom como Will Turner y Geoffrey Rush como el Capitán Barbossa en el éxito mundial de 2003 Piratas del Caribe: la Maldición de lPerla Negral. Con dosis por igual de belleza y determinación en el papel de una joven aristocrática envuelta en una aventura fantástica, Knightley interpreta nuevamente a Elizabeth en PIRATAS DEL CARIBE: EN EL FIN DEL MUNDO.
Tras finalizar Piratas del Caribe: la Maldición del Perla Negra, Keira inició la producción de otra épica de Jerry Bruckheimer, King Arthur, donde personificó a Guinevere. Dirigido por Antoine Fuqua, el film fue co-protagonizado por Clive Owen como Arthur.
En noviembre de 2003 se estrenó el film de Richard Curtis Love, Actually, donde Keira formó parte de un impresionante elenco compuesto por Colin Firth, Hugh Grant, Laura Linney, Liam Neeson, Alan Rickman y Emma Thompson. Y además de Pride & Prejudice – film que protagonizó junto a Matthew Macfadyen, Brenda Blethyn, Judi Dench y Donald Sutherland –, en 2005 Knightley protagonizó a la polémica modelo devenida en cazadora a sueldo Domino Harvey en el innovador drama de acción de Tony Scott, Domino.
En 2006, Knightley viajó a Europa, durante una pausa en la filmación de Piratas Del Caribe: El Cofre De La Muerte y PIRATAS DEL CARIBE: EN EL FIN DEL MUNDO, para protagonizar la adaptación cinematográfica del director Francois Girard (The Red Violin) de la novela best-seller de Alessandro Baricco, Silk. El drama romántico está co-protagonizado por Michael Pitt, Alfred Molina y Koji Yakusho. Le siguió el papel protagónico en Atonement, de Joe Wright, el director de Pride & Prejudice. Y en abril de 2006, Chanel anunció que Knightley será la nueva cara de la fragancia Coco Mademoiselle.
Su debut profesional fue a los siete años en la televisión británica en Royal Celebration. Entre sus primeros créditos pueden citarse las realizaciones cinematográficas A Village Affair, Innocent Lies y Star Wars: Episode 1 – The Phantom Menace, así como la serie televisiva The Bill, las películas para la televisión Treasure Seekers, Coming Home, Princess of Thieves, de Walt Disney (como Gwyn, la hija de Robin Hood) y las miniseries Oliver Twist y Doctor Zhivago (donde interpretó a Lara Antipova en la adaptación de la clásica novela de Boris Pasternak). Otros de sus créditos en el cine son The Hole, Pure y The Jacket, este último, un thriller junto a Adrien Brody.
Hija de la dramaturga Sharman Macdonald y del actor Will Knightley, Keira nació en Teddington, Middlesex, Inglaterra. Actualmente vive en Londres.

GEOFFREY RUSH (Capitán Barbossa), uno de los más respetados actores australianos, inició su carrera en el teatro y la ha expandido a lo largo de más de 70 producciones teatrales y unos 20 filmes de largometraje. Luego de su sorpresiva aparición en el último minuto de Piratas del Caribe: el Cofre de la Muerte, Rush regresa en toda su plenitud en En el Fin del Mundo.
Rush obtuvo un Emmy, un Golden Globe y un premio de la Screen Actors Guild por su cautivadora interpretación en la realización de HBO Films The Life and Death of Peter Sellers, donde personificó al famoso actor. También actuó en el film Munich, nominado al Oscar, bajo al dirección de Steven Spielberg, y recientemente filmó para Universal Pictures Elizabeth: The Golden Age.
Pero este actor llamó la atención de muchos por su papel protagónico en el film de Scott Hicks Shine, una personificación del pianista prodigio David Helfgott que le valió el Premio de la Academia al Mejor Actor, el Golden Globe, el premio del Screen Actors Guild, el BAFTA, el del Film Critics’ Circle of Australia, el del Broadcast Film Critics, el AFI y el de New York and Los Angeles Film Critics Fue nominado al Premio de la Academia por su interpretación en Quills, de Philip Kaufman, y recibió una nominación al Premio de la Academia y al Goleen Globe por Shakespeare in Love.
Tras graduarse en inglés en la University of Queensland, Geoffrey viajó a Paris para estudiar en la Jaques Lecoq School de Mimo, Movimiento y Teatro. A su regreso a Australia, representó al Fool junto a Warren Mitchell en King Lear y coprotagonizó con su compañero Mel Gibson en Waiting for Godot. Ente sus créditos en el cine, pueden citarse Candy, Intolerable Cruelty, Finding Nemo, Ned Kelly, Lantana, Frida, The Tailor of Panama, House on Haunted Hill, Mystery Men, Elizabeth, Les Miserables, A Little Bit of Soul, Children of the Revolution, On Our Selection, Twelfth Night, Oscar and Lucinda y Starstruck.
Fue miembro principal del Jim Sharman’s Pioneering Lighthouse Ensemble a principios de los 80, y allí representó papeles protagónicos en numerosas obras clásicas. Sus trabajos en el teatro le valieron numerosas distinciones, como el premio de la Sydney Critics Circle a la Actuación Más Sobresaliente, el premio Variety Club al Mejor Actor y el premio Victorian Green Room 1990 por su aclamada interpretación en The Diary of a Madman, de Neil Armfield. Recibió también nominaciones al premio al Mejor Actor del Sydney Critics’ Circle por sus papeles protagónicos en The Government Inspector, de Mogol, Uncle Vanya, de Chéjov y Oleanna, de Mamet. En 1994 le fue otorgado el prestigioso premio Sidney Myer Performing Arts por su trabajo en el teatro.
El actor vive en Melbourne, Australia, junto a su esposa y sus dos hijos.

STELLAN SKARSGARD (Bootstrap Bill) se convirtió en una figura familiar para el público de todo el mundo luego de actuar junto a Emily Watson en Breaking the Waves, de Lars von Trier. Pero su carrera abarca más de 30 años, con numerosas y brillantes interpretaciones en una amplia gama de papeles en el cine, el teatro y la televisión. Como adolescente en su Suecia natal, Skarsgard fue la estrella de la serie televisiva de 1968 Bombi Bitt och jag y con un poco más de 20 años era ya un avezado actor de televisión, cine y teatro. La fama de este actor nacido en Gotemburgo se extendió más allá de Escandinavia con The Simple-Minded Murderer, de Hans Alfredson. Su papel del inocente llevado a la violencia por la crueldad de los otros le valió el Oso de Oro en el Festival de Cine de Berlín.
Desde entonces, y a través de más de 60 filmes, Skarsgard demostró ser un actor notablemente versátil. Entre sus interpretaciones están las del súper agente sueco Carl Hamilton en Code Name Coq Rouge, de Pelle Berglund y en The Democratic Terrorist, e interpretó el papel principal en Good Evening, Mr. Wallenberg, de Kjell Grede, la historia verdadera del diplomático sueco que salvó a miles de judíos en Auschwitz. Sus restantes créditos en notables filmes escandinavos incluyen: P&B, de Alfredson; The Serpent’s Way Up the Naked Rock, de Bo Widerberg; Friends, de Kjell-Ake Andersson; Hip Hip Hurrah!, de Grede; The Women on the Roof, de Carl Gustaf Nykvist; The Ox, de Sven Nykvist (nominado al Premio de la Academia al Mejor Film en Lengua Extranjera); The Slingshot, de Ake Sandgren; Zero Kelvin y Aberdeen de Hans Petter Moland; e Insomnia, de Erik Skjoldvjaerg.
La reputación de Skarsgard comenzó a depararle papeles en los Estados Unidos y en otras partes del mundo, con interpretaciones clave en filmes como The Hunt for Red October, de John McTiernan; Wind, de Carroll Ballard; Savoir, de Peter Antonijivic; My Son the Fanatic, de Udayan Prasad; Amistad, de Steven Spielberg; Good Will Hunting, de Gus Van Sant; Ronin, de John Frankenheimer; Deep Blue Sea, de Renny Harlin; Signs and Wonders, de Jonathan Nossiter; Time Code, de Mike Figgis; Taking Signs, de Istvan Szabo; y City Of Ghosts, de Matt Dillon. Tras su labor en Breaking the Waves, que ganó el Gran Premio en el Festival de Cine de Cannes, Skarsgard volvió a trabajar para Lars von Trier en Dogville.
Más recientemente, lo vimos en la producción de Jerry Bruckheimer King Arthur, junto a Clive Owen y Keira Knightley; como el Padre Merrin en Exorcist: The Beginning, de Renny Harbin; y en Beowulf & Grendel, de Sturla Gunnarsson, filmada en Islandia. Al mismo tiempo que filmaba Piratas Del Caribe: El Cofre De La Muerte, Skarsgard viajaba a España para interpretar el papel protagónico de Francisco de Goya, el legendario pintor español, en Goya’s Ghosts, de Milos Forman. Luego actuó en Waz y actualmente está preparando su próximo film, Mamma Mia.
En la televisión, Skarsgard protagonizó School for Wives, de Ingmar Bergman; The Wild Duck, de Bo Widerberg; y, en los Estados Unidos, Noon Wine para PBS, The Harlan County War para Showtime y Helen of Troy para USA Network. Es también uno de los actores teatrales más celebrados de Suecia, con 16 años de permanencia en el Royal Dramatic Theatre de Estocolmo, bajo la dirección de talentos como Ingmar Bergman, Alf Sjoberg y Per Verner-Carlsson.
 

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